Menos zonas jóvenes, mejor utilización de los recursos municipales. El modelo de juventud de Zaragoza, a debate.

Zaragoza

El debate Concejales en Plano del Hoy por hoy Zaragoza ha contado ccon las presencia de los portavoces municipales y la concejala delegada de juventud, Ruth Bravo. Tras la concentración del pasado sábado por el cierre de las zonas jóvenes han debatido sobre el modelo de actividades para jóvenes que el equipo de gobierno está implantando en la ciudad, enmarcado en su estrategia 2030.

El equipo de gobierno ha defendido que el cambio en el modelo de las zonas jóvenes se ha apoyado en más de 4.000 aportaciones dentro de la estrategia 2030 y en informes técnicos municipales. Ha señalado que los equipamientos no han desaparecido, pero que se estaba destinando un 70-80% del presupuesto a estructura y no a programas para jóvenes, con actividades que incluso han tenido cero inscritos. Han insistido en que la decisión ha buscado eficiencia en el uso del dinero público y que otros programas como 12 Lunas, Z16, Cuatro Artes o el de emancipación juvenil han demostrado más impacto, con más de 7.000 usos en seis meses. También han recordado que Zaragoza es una ciudad en la que se puede acceder a estos servicios con facilidad por su cercanía.

Desde la oposición, Lola Ranera del PSOE ha acusado al gobierno de priorizar el marketing y los eventos ideológicos frente a los servicios de juventud, criticando el cierre de siete casas y la reducción de proyectos de integración. Han defendido que la clave es ideológica, porque las casas de juventud han fomentado espacios críticos, participativos y feministas que no interesan a la derecha. Además, han comparado las cifras de uso con otros servicios municipales poco rentables, como las bibliotecas, el servicio de bicicletas o incluso la Romareda, para argumentar que la falta de masividad no justifica un cierre.

Por su parte, Julio Calvo de Vox ha señalado que el debate no ha sido realmente sobre juventud sino sobre la situación laboral de los trabajadores de estos centros, que temen perder unos 30 empleos. Han sostenido que las administraciones deben replantearse qué servicios pueden prestar sin duplicar funciones con otras instituciones, y han subrayado que si algunas actividades tenían cero inscritos, es lógico revisar la gestión del dinero público.

Finalmente, Suso Dominguez, representando a Zaragoza en Común, ha denunciado una ofensiva continuada contra las políticas de juventud, recordando recortes previos en el Consejo de la Juventud, asesorías y programas como Igualarte o Solidarizarte, además de la cancelación de eventos como Noche insomne. Han afirmado que el proceso participativo no ha contemplado cierres y que las protestas de 1.500 jóvenes muestran que no se les ha escuchado. También han acusado al gobierno de censurar expresiones juveniles en actos y redes sociales, y de actuar con obstinación al imponer unas condiciones rechazadas por las empresas en las licitaciones.