La necesidad de reciclar lo orgánico: pompas de jabón cuando se recicla bien, y humo cuando se hace mal

Huesca

El Consorcio Agrupación nº1 de Huesca y Grhusa ponen en marcha una nueva campaña de sensibilizacón de uso del cubo marrón, para el reciclaje de residuos orgánicos, bajo el lema “Tu cubo marrón abona el futuro”. Se trata de la fracción que menos se recicla, con 2.000 toneladas de las 20.000 que se producen, frente a las 7.000 de resto, cuando casi la mitad de los residuos que se generan en los hogares son restos de comida y materia biodegradable. Por ello, se pone en marcha “La Marroneta”, un carruaje interactivo que recorrerá Huesca y la Comarca de la Hoya, convirtiéndose en un aula móvil.

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Teresa Viu gerente de Grhusa indicaba que la razón de esta campaña es la necesidad de concienciar y sensibilizar a la población sobre la separación de residuos en nuestros hogares. “Nosotros en nuestro territorio estamos gestionando aproximadamente 45.000 toneladas de residuos, casi la mitad es de residuo orgánico: estamos hablando de unas 20.000 toneladas, que tendrían que separarse y llevarse al contenedor marrón, y sin embargo las estamos llevando al vertedero, porque actualmente únicamente recogemos separadamente 2.000 toneladas. Al ir al vertedero, esa es la solución medioambientalmente más nefasta”.

Se pretende sensibilizar y enseñar a la ciudadanía, porque frente a las 2.000 toneladas de orgánico, se recogen unas 6.000 toneladas de envases, misma cantidad que de papel y cartón. Parece claro que el reciclaje en el cubo marrón es el menos fácil, porque los residuos se pudren.

Viu asegura que “hay que conseguir separarla y bajarla al contenedor cada 2 o 3 días, y si se baja cada 2 o 3 días, no tiene ningún problema. Los cubos que estamos dando, están aireados. Esto es para que la materia orgánica coja oxígeno del ambiente y no se pudra, sino que empiece una degradación aeróbica de los residuos orgánicos”.

Gracias a la campaña, se puede aprender a separar correctamente los biorresiduos, a través del juego. Si se echa a la Marroneta material compostable, suena la música “La marroneta, la marroneta no para de compostar…”, y el carruaje saca pompas de jabón. Si se echan residuos no orgánicos, se queja y saca humo, “menudo marrón…”.

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Al reciclarlos, de residuos pasan a ser recursos. La segunda vida que se les da hacer compost, abono, para las macetas. De hecho, se estudia la posibilidad de regalar ese abono a quienes contribuyan con sus residuos.

Se han repartido unos 19.000 cubos, pero no se utilizan y no hay conciencia de separación en casa. De ahí la necesidad de emprender campañas de sensibilización como esta.