"Salir del infierno ha merecido la vida"

Huesca

Bajo el lema "Frente al terror machista, nuestra lucha feminista" numerosas personas volvían a concentrarse el 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en la plaza de Navarra de la capital oscense en contra de esta lacra.

Un acto que comenzaba con la lectura del nombre de las 39 mujeres asesinadas este año y que continuaba con el testimonio de Clara, víctima de violencia machista. Un momento emocionante de la concentración en el que señalaba "yo salí de un infierno, de uno de esos que te apagan, que te quiebran, que te hacen dudar hasta de tu sombra, pensé que sobrevivir sería lo máximo a lo que podía aspirar" pero "salí con miedo, con dudas, con mi alma hecha trizas, ese día no fui fuerte, no fue valiente, fui humana".

Se dirigía a las mujeres que sufren esta violencia, que no están solas y que llegará su gran día "mientras tanto, mírate con amor". También a las que ya salieron "a ti, mujer, que ya saliste, pero aún te duele respirar a veces. A ti, mujer, que ya saliste, pero aún te duele respirar a veces. No tienes por qué ser perfecta para estar bien.La culpa que sientes no es tuya, te la metieron a base de miedo, de silencios, de manipulación".

También se dirigía "a quienes acompañéis desde fuera, familia, amigas, amigos. Sé que duele mirar y no entender. Sé que da rabia verla volver, justificar, callar. Pero vuestra presencia, vuestra paciencia, es más importante de lo que imagináis. No la juzguéis, no la empujéis, no la dejéis sola. Ella ya carga bastante infierno por dentro, vuestra presencia, aunque parezca poca, es lo que la sostiene el día que por fin llega hasta aquí".

También un recuerdo para las que ya no están "a las que faltan y nunca debieron faltar, yo hoy os nombro con respeto, con dolor y con la esperanza de que algún día ninguna mujer tenga que marcharse para que el mundo despierte".

Y añadía que "y si alguien necesita escucharlo, sí se sale del infierno, sí hay vida después, sí vuelve la risa, vuelve la paz” para terminar “salir del infierno ha merecido la vida".

Posteriormente tenía lugar la lectura del manifiesto para decir basta a la violencia contra las mujeres en ámbitos muy diferentes.