Asaja destaca que ha sido un año de "incertidumbre" en el cereal y de enfermedades en el sector ganadero

Huesca

El sindicato agrario Asaja ha recapitulado lo que ha sido este año agrícola y ganadero, un año marcado por enfermedades sanitarias, como la peste porcina, y por paradojas como una gran producción de cereal pero con rendimientos económicos escasos. Son aspectos que sirven para sintetizar este 2025 en rasgos generales.

Entrando al detalle, la producción de cereal en la provincia de Huesca ha batido "récord histórico", con 1.160.000 toneladas, pero paradójicamente ha habido unos "catastróficos rendimientos económicos". Así lo ha definido el presidente de Asaja Huesca, José Fernando Luna, que indicado que ante este problema será necesario "reunirse desde las organizaciones profesionales con mesas de diálogo con el Gobierno para hacer ver lo que tienen que ser todo tipo de ayudas al precio del cereal". La valoración del año, por tanto, este este sentido, es de "incertidumbre".

Una incertidumbre que aún se agrava más para el sector ganadero, porque ha atravesado un año marcado especialmente por las cuestiones sanitarias, con enfermedades como ha razonado el secretario general de Asaja Huesca, Ramón Solanilla, que ha recordado que "enfermedades como la lengua azul, la dermatosis Nodular Contagiosa y especialmente la peste porcina".

Han sido problemas que se han encontrado en este 2025. Solanilla advertía de que una crisis del porcino tendría "un efecto arrastre con consecuencias para todas las actividades" del sector Primario.

Achacan fundamentalmente estas cuestiones sanitarias a la "convivencia de los humanos con la fauna silvestre" y que, consideran, debe "controlarse con medidas en toda Europa".

Pero también ha sido un año de "presión para agricultores y ganaderos, marcado por uno de los peores escenarios sanitarios de las últimas décadas, graves daños climáticos" y una reforma de la Política Agraria Común (PAC) que, de salir adelante, “puede resultar directamente catastrófica para el sector”.

El presidente y el secretario general de ASAJA Huesca, Fernando Luna y Ramón Solanilla, han presentado el Balance Agrícola y Ganadero de 2025 denunciando que, pese a haber sido un buen año agronómico en muchos cultivos, “los agricultores y ganaderos vuelven a cerrar el ejercicio con números que no salen”.

Un sector ejemplar frente a uno de los peores años sanitarios ASAJA Huesca ha querido destacar la profesionalidad y responsabilidad de los ganaderos, que han sabido hacer frente a enfermedades como la Dermatosis Nodular Contagiosa en vacuno, la Gripe Aviar o la Peste Porcina Africana, evitando que las explotaciones se vieran afectadas y manteniendo abiertas las exportaciones.

“Estamos ante uno de los peores años sanitarios para la ganadería, y aun así el sector ha respondido con rigor, inversiones y cumplimiento estricto de los protocolos, algo que no siempre se ha visto en otros países europeos”, ha subrayado Solanilla.

A pesar de esta situación, la cabaña ganadera se mantiene, aunque ASAJA Huesca alerta de un problema estructural cada vez más grave: la desaparición de ganaderos y la falta de incorporaciones. Los precios se han sostenido de forma muy ajustada y sectores como el ovino siguen dependiendo casi en exclusiva de la exportación ante el descenso del consumo interno.

En porcino, ASAJA Huesca ha denunciado con firmeza la caída de precios tras la aparición de la peste porcina africana, con descensos de hasta 37 euros por animal, una situación “insostenible” para explotaciones que requieren enormes inversiones. “Si el porcino entra en crisis, arrastrará a todo el sistema productivo: cereal, transporte, mataderos y empleo”, han advertido.

Desde ASAJA se insiste en la importancia de la coordinación entre administraciones ya que las enfermedades no entienden de fronteras. Sobre todo, mirando con preocupación a Francia y la evolución del tratamiento de enfermedades como la DNC.

Agricultura sin rentabilidad y una gestión del agua incomprensible. En cereal de invierno, las lluvias permitieron buenas producciones, pero ASAJA Huesca denuncia que los bajos precios y el aumento de los costes de producción, especialmente de los fertilizantes, que han subido entre un 10% y un 30%, ponen en duda la rentabilidad de la próxima campaña.

La organización ha sido especialmente crítica con la gestión del agua, denunciando que en 2025 se han vertido al mar más de 1.000 metros cúbicos de agua mientras se imponen restricciones y tasas a los agricultores. “Estamos hablando de soberanía alimentaria, pero se impide sembrar cultivos estratégicos como el maíz por falta de planificación hidráulica”, ha señalado, Fernando Luna, presidente de ASAJA Huesca, reclamando de nuevo presas y embalses.

Fauna silvestre: un problema sanitario y productivo ignorado ASAJA Huesca ha vuelto a alertar del descontrol de la fauna silvestre, al que considera uno de los principales problemas sanitarios y agrarios de Aragón. “La sobreprotección de determinadas especies está provocando daños en cultivos, abandono de tierras y un aumento del riesgo sanitario para la ganadería”, han denunciado, recordando que ya advirtieron de esta situación en movilizaciones anteriores.

La organización concluye advirtiendo de que no es compatible la expansión del oso y el lobo con el actual modelo de ganadería extensiva.