El Real Zaragoza afronta otra final antes de Navidad

Zaragoza

Principalmente en los últimos años de los 13 de la vida del Real Zaragoza en segunda división, se ha convertido en un clásico que los blanquillos lleguen a la última jornada del año natural en una situación delicada. La de este es todavía más grave, con el equipo último a cuatro puntos de la permanencia, en serio riesgo de desplomarse y terminar saliendo de la redes del fútbol profesional. La derrota ante el Cádiz, en el Ibercaja Estadio, obliga más a los de Sellés en El Plantío. Su escaso margen de error, prácticamente juegan sin red, le obliga a no fallar el próximo domingo (18,30 horas). Debe sumar para no alejarse de la barrera de la salvación y poder acceder con garantías al mercado invernal, que se abre el 2 de enero.

La plantilla ha comenzado la semana entrenando en dos bloques. El grueso principal, con los en teoría sanos, se ha ejercitado en el Ibercaja Estadio, y los lesionados han trabajado en el gimnasio de la Ciudad Deportiva. Llamativas las ausencias en el estadio de Bazdar, Pau Sans y Kosa, síntoma esclarecedor de sus candidaturas a salir del Real Zaragoza.

Francho continúa con las molestias en la rodilla, que le impidieron jugar contra el Cádiz, y sobre Aguirregabiria, los servicios médicos están a la espera de pruebas. Sin embargo, Sellés ha contado con la vuelta al trabajo del grupo de Cuenca, Saidu y Akouokou, previsibles altas para la cita del fin de semana. Radovanovic se ha quedado en la Ciudad Deportiva por reparto de cargas.