La desaparición de los glaciares se lleva anunciando por los expertos desde hace un tiempo y el pasado 12 de agosto de 2021, los ríos de deshielo que se observaron sobre el hielo del glaciar d’Ossoue, en el Vignemale, lo evidencian de forma implacable. Es uno de los glaciares que más rápidamente está desapareciendo. Si la media de pérdida de espesor en los glaciares del Pirineo es de 6-7 metros, este glaciar ha perdido casi 10 de media, algo que sólo es un reflejo de la situación general. Sólo es cuestión de tiempo que el Pirineo se quede sin glaciares, un horizonte que Juan Ignacio López Moreno, uno de los mayores expertos en hidrología de los hielos, vaticina en sólo dos o tres décadas. CORTE 1 LÓPEZ MORENO, investigador del Instituto Pirenaico de Ecología (CSIC), experto en hidrología de los hielos Hace unos años el informe “El Cambio Climático en los Pirineos”, elaborado por más de un centenar de expertos coordinados en torno al Observatorio Pirenaico del Cambio Climático, ya alertó de que la mitad de los glaciares del Pirineo han desaparecido en los últimos 35 años. López Moreno apunta al glaciar d’Ossoue o el de Monte Perdido como los que mayor pérdida de hielo están registrando. Un estudio que llevan realizando desde hace una década ha observado pérdidas de hielo de hasta 30 metros de espesor en algunos sectores de estos dos glaciares, “lo que supone que en tan sólo 10 años han perdido un espesor similar a siete plantes de un edificio”, explica López Moreno. CORTE 2 LÓPEZ MORENO La razón que apunta este investigador del IPE, con más de 100 artículos en revistas científicas de prestigio y 500 citaciones en bases de datos científicas internacionales, es el cambio climático. Los estudios hablan de una menor nivología, pero sobre todo, puntualiza, se debe al aumento de la temperatura en el Pirineo, de 1’5 Cº, algo incompatible con la supervivencia de los glaciares. El de Ossoue está en la cara sur del Vignemale, “apenas le queda ya nieve y encima está totalmente manchada por polvo sahariano, por lo que se fundirá uy pronto. Un año más, nova a tener nada de acumulación de nieve, por lo que no podrá formar nada de hielo nuevo y le llevará a una pérdida total del dinamismo pronto. Además, queda mucho verano por delante”. La pérdida de los glaciares del Pirineo es irreversible, “pero un cambio de la acción del hombre en las emisiones puede salvar los glaciares de otras cordilleras y frenar el aumento de temperatura”, algo con muchas otras implicaciones, aunque ya no haya glaciares, explica Juan Ignacio López Moreno.