La fase de montaña de la Campaña Antártica concluye con un alto grado de satisfacción
El lunes comienza la fase de relevo en Zaragoza donde participan las dotaciones de las dos campañas, la saliente y la entrante
Este viernes, concluye la fase de montaña en la que trece efectivos del Ejército de Tierra han estado preparando, desde el lunes, en las inmediaciones del parque Posets Maladeta, la XXXIII Campaña Antártica. Durante cinco días han tratado de mejorar sus conocimientos teóricos y prácticos en condiciones de frío, hielo o nieve con objeto de tratar de desenvolverse con soltura en el terreno y en las condiciones que van a encontrar en la Antártida.
El comandante Joaquín Núñez, jefe de la XXXIII Campaña Antártica, valoraba esta fase con un alto grado de satisfacción porque ha habido nieve y se han podido realizar todas las actividades tal y como estaban programadas. El único ‘pero’ ha sido la temperatura muy alejada de los hasta 20 grados bajo cero que les esperan en la Antártida. Aún así, el valle de Benasque ofrece ‘unas buenas condiciones para adquirir el conocimiento técnico necesario para moverse con facilidad en la nieve’, decía.
Joaquín Núñez. Campaña Antártica
Alrededor de 200 militares se presentaban voluntarios a esta misión, de los cuales el jefe de la campaña elige 10 y 2 repiten del anterior ejercicio para dar continuidad a la misión. El comandante Núñez explicaba que los criterios de selección fueron las cualidades técnicas de cada uno en su área, lo cual no implica que tengan que tener conocimientos de montaña pero sí ser polivalentes para prestar cobertura a los científicos en las labores que sean necesarias. Al final, lo que se busca es tener un equipo compensado, añadía.
Desde el lunes, se va a desarrollar en Zaragoza, otra fase la del relevo con los efectivos de la campaña saliente, para conocer las particularidades de cada área. Y todavía les quedará una tercera, de navegación, que tendrá lugar en Pontevedra. La base se encuentra ahora cerrada y será a mediados de diciembre cuando viajen a la Antártida donde permanecerán hasta finales de abril o principios de mayo de 2020.
La Campaña Antártica española constituye un modelo de cooperación entre diferentes instituciones públicas y privadas al servicio de la I+D+i en el marco del Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación. El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades financia los proyectos que se realizan tanto en las bases antárticas como a bordo del buque Hespérides –a través del subprograma de Investigación Polar de la Agencia Estatal de Investigación– y la logística de la campaña. Además, a través del Comité Polar, coordina las actividades que los diferentes organismos desarrollan durante las campañas. Las entidades participantes en estas actividades son la Unidad de Tecnología Marina del CSIC, que gestiona la BAE Juan Carlos I en la Isla Livingston y coordina la logística general de la campaña antártica; el Ejército de Tierra, que gestiona la BAE Gabriel de Castilla en la Isla Decepción, y la Armada, que opera el BIO Hespérides. Tanto el BIO Hespérides como las bases antárticas forman parte del mapa español de Infraestructuras Científicas y Técnicas Singulares (ICTS), instalaciones, recursos o servicios excepcionales en su género, cuya importancia y carácter estratégico justifica su disponibilidad para todo el colectivo de I+D+i.
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