La "nueva" Feria de la Candelera anima las calles de Barbastro
Esta edición sólo ha contado con un centenar de puestos de venta
Barbastro ha recuperado parte de su Feria de la Candelera en una jornada marcada por el buen tiempo. Más de un centenar de puestos han permitido feriar, el único fin de una feria, que cuenta con 510 años de historia ininterrumpida. Precisamente fue la reina Germana de Foix quien la instauró en 1.512 con la intención de que la ciudad de Barbastro vendiera todo aquello que produce como el aceite o el grano y se diera cabida a todos los productos llegados del reino.
Cumpliendo con la tradición se ha realizado la bendición de candelas y caretas, dos de los emblemas de la fiesta, que siempre va acompañada por una pequeña recreación histórica en este caso de la lectura del Bando del Privilegio por parte de la reina y su corte.
Este 2022 ha sido el nuevo punto de partida de esta feria, una de las más antiguas de Aragón y la primera de su calendario ferial. El buen tiempo ha permitido que el público, mucho menos populoso que en otras ediciones debido a la pandemia, haya disfrutado de una jornada de compras.
“El balance es satisfactorio en un año en el que desgraciadamente no hemos podido contar con todos los puestos como en ediciones anteriores”, aseguraba la concejal de Desarrollo, Belinda Pallás, acompañada por el alcalde de Barbastro, Fernando Torres, que remarcaba la gran participación en una candelera especial “que esperamos que sea un punto y aparte y el año que viene se pueda celebrar como siempre”, destacaba el alcalde.
Puestos de plantero, de ferretería, de alimentación, menaje, textil, productos artesanos… han vuelto a copar las calles de Barbastro, con una gran separación y delimitados según la normativa COVID-19 que ha permitido pasear tranquilamente por el centro de la ciudad del Vero.
Una alegría en las calles que los hosteleros y comerciantes han agradecido en lo que ha sido una vuelta a la normalidad con mascarilla pero con más ganas que nunca.