La oficina del DNI en Monzón podría estar a comienzos de 2020

Más de diez años después desde que el ayuntamiento de Monzón iniciara las gestiones para que la Dirección General de la Policía tuviera en la ciudad una unidad de documentación para expedir y renovar el DNI o el pasaporte, entre otros documentos, se convertirá en una realidad a comienzos de 2020, según explicaba el alcalde, Isaac Claver, en la sesión ordinaria de pleno celebrada este miércoles.

La ubicación será donde se encuentran las oficinas del Servicio de Atención al Ciudadano (SAC), que pasarán a estar en el local de la antigua imprenta Martínez. Adaptar las instalaciones para la Policía supondrán más de 40.000€.

La concesión para este fin salía por unanimidad, aunque PSOE y Cambiar, a través de sus portavoces, Gonzalo Palacín, y Vicente Guerrero, apuntaban que la ubicación propuesta para el SAC tenía alguna deficiencia, sobretodo, en materia de accesibilidad y pensaban en otras posibles ubicaciones en la propia plaza. Guerrero pedía además una memoria económica del coste. El alcalde zanjaba la cuestión apuntando que se viene pagando un alquiler por ese local y, por tanto, es darle una utilidad cuanto antes.

Un pleno en el que se sorteaban la composición de las mesas de cara al 10-N y se aprobaba el estudio de detalle de Casa Salas como futuro apartahotel.

Además se aprobaba el reglamento y funcionamiento del parquin de Cortes de Aragón donde el concejal de Cambiar solicitaba una memoria de costes y planteaba el pago simbólico de una cantidad para sustentar el mantenimiento. Guerrero daba el sí a la apertura de la infraestructura, pero lamentaba que el reglamento se apruebe después. Por su parte, Palacín del PSOE recordaba el coste de la infraestructura de 2, 4 millones de euros y esperaba que la exposición pública resolviera algunas dudas que tienen sobre reglamento. El portavoz socialista pedía que se estudiara la posibilidad de sacar algún rendimiento económico a la instalación.

Claver y Javier Vilarrubí, responsable del área, señalaban que se había dado solución a una vieja reivindicación de la asociación de Comercio y que el uso irá adaptando el reglamento, pero que tenía que abrirse a los ciudadanos para facilitar el aparcamiento y la movilidad.

Vilarrubí como concejal de Personal era el encargado de defender el acuerdo de las 35 horas semanales para los trabajadores municipales, que salía adelante por unanimidad. El edil defendía que se ha culminado en escasos 100 días un trabajo precedente, gracias a que la Policía Local ha renunciado hasta tener el personal necesario y la cesión también desde Deportes. Vilarrubí se congratulaba de la medida que permitirá mejorar la calidad de vida de los trabajadores, sin disminuir la eficacia de la administración ya que se han remodelado las unidades de trabajo. El acuerdo cuenta con los informes favorables de intervención y el compromiso de su ejecución, recordando que no se pueden contratar más trabajadores.

Adelardo Sanchis del PSOE mostraba dudas sobre el cumplimiento de las 35 horas semanales sin incrementar las horas extraordinarias y recordaban que llevaban tiempo trabajando en el asunto sin haber podido cuadrar el acuerdo.

Vicente Guerrero de Cambiar incidía en que les hubiera gustado sacar adelante el acuerdo cuándo gobernaban, pero que les faltó tiempo y preguntaba al concejal si se iba a sacar la oferta pública de empleo aprobada en el 2018 y que permitiría bajar aún más la interinidad de la plantilla. Además, añadía en que su abstención en comisión era porque tenía que realizarse la consulta en asamblea.

Con respecto a las mociones salían por unanimidad la del PSOE de convertir la ciudad en Progrifo y la de Cambiar sobre la pérdida de la venta de billetes de tren en ventanilla. Mientras que la del PSOE relativa a una actuación en el marco del ARRU en la calle Arriba y Callejón del Obispo caía por los votos en contra del equipo de Gobierno que la veían precipitada, ya que estaba arrancando a nueva convocatoria.

El alcalde pedía a Guerrero que transformara en institucional la moción sin conseguirlo, así que se votaba el texto inicial de adoptar medidas que eviten el posible cierre de la venta de billetes en la estación de tren planteado por Cambiar. Raúl Castanera de Cs recordaba que el tren vuelve periódicamente a la mesa del pleno y señalaba la importancia de cambiar horarios para mejorar el servicio.

Jesús Guerrero del PAR apuntaba que el tren es un asunto de ciudad y recordaba como ellos, en el anterior mandato, no tuvieron problema en adaptar su texto sobre el tren para convertirlo en institucional.

Gonzalo Palacín apuntaban que una directiva europea hace que se privaticen las líneas en enero y que, por tanto, serán las empresas las que tengan que hacerse cargo del servicio por lo que se antoja que en líneas deficitarias como la de Monzón se deberá complementar con recurso públicos. Añadía también el incremento de mercancías y algunas mejoras de seguridad y accesibilidad en el andén y la ejecución de la ampliación del apartadero de Selgua, que permitirá trenes de 750 metros, pero a pesar de todo apoyaba la moción para que no se pierdan servicios.

El alcalde concluía que se había reunido con el responsable de RENFE en Aragón, que le apuntó que no era seguro, pero si probable ya que las oficinas de Correos van a empezar a vender billetes de tren. Además, anunciaba datos de aumento de viajeros en los últimos tres años.

Content not defined