Las almetas recorrieron con éxito las calles y caminos de Lupiñén
Cerca de seiscientas personas han participado en la tercera marcha nocturna teatralizada O Camín d’as Almetas que se celebró este sábado<br>


La localidad de Lupiñén ha acogido en la noche del sábado 2 de noviembre la tercera
edición de la marcha senderista teatralizada O Camín d’as Almetas, una actividad que,
fundamentada en las tradiciones locales de la noche de difuntos, ha evolucionado
hacia una fiesta en la que se combinan deporte y cultura. Organizada por la Comarca
Hoya de Huesca|Plana de Uesca y el Ayuntamiento de Lupiñén-Ortilla, ha reunido a
cerca de seiscientos participantes, entre inscritos, voluntarios y visitantes.
La novedad de esta edición fue que todos los elementos de la fiesta giraban en torno
a la teatralización de una narración tradicional de la zona en la que se cuenta la
misteriosa experiencia de Martín con la memoria de su difunto pariente Francho en la
noche de ánimas. En su recreación en una veintena de escenas que se salpicaban a lo
largo de los cinco kilómetros de marcha por caminos del entorno de Lupiñén han
participado alrededor de un centenar de vecinos del municipio. La participación e
implicación de las gentes de Lupiñén es creciente y el resultado excelente, logrando
transformar la imagen de este pueblo y generando episodios escénicos de gran
impacto visual.
Tras la recepción con café y repostería de la zona y los talleres de maquillaje, el acto
dio inicio con la entrada en la plaza de la comitiva de totons (fantasmas negros)
encarnados por los Gaiters d’a Tierra Plana que anunciaban la llegada, como es
tradición, de L’Abadesa, esa bruja de Aniés que fue ajusticiada en 1574, y que, en esta
ocasión, acompañada por los integrantes de la compañía Habana Teatro, se subió al
escenario para narrar el cuento de Francho, con el apoyo de sombras chinescas y la
música de Traverso a cargo de Jennifer Cremallet.
El público guardó un sobrecogedor silencio durante toda su intervención y los más
pequeños se agolparon en las primeras filas hasta que L’Abadesa prendió su antorcha
e hizo el alegato con el que abría la marcha y, acompañada de la alcaldesa de Lupiñén
y la comitiva de totons, no sin dificultad, encendió la hoguera situada en el centro de
la plaza Torraza.
A las siete y cuarto arrancaba la marcha de quinientas almetas, cubiertas con capas
blancas, por las calles del pueblo, donde fueron topándose con las casas decoradas,
con antiguas fotos de difuntos y con escenas variadas, desde una morgue con el
enterrador que tomaba medidas a los caminantes mientras cavaba una fosa, hasta las
beatas rezando en reclinatorios por el alma de Francho, pasando por una
extraordinaria recreación de un tétrico cementerio donde los más jóvenes
colaboradores danzaban sobre las tumbas.
Abandonado el casco urbano y con la noche ya cerrada, las almetas iniciaban el
recorrido por los caminos donde se salpicaban hasta una decena de escenas de la
historia de Francho. Actores de todas las edades se transformaban en escolares, en
abuelos, en pastores, en sacerdotes, en enterradores, en la muerte y en un sinfín de
personajes que interaccionaban con los participantes pasando por lugares como el
humilladero, la Cenia, la ermita de la Virgen de la Huerta o la ermita de San Pedro,
donde estaba el avituallamiento, donde además de frutos secos, zumos y golosinas, se
repartieron los tradicionales buñuelos acompañados de vino moscatel para los
adultos.
Después de alrededor de dos horas de andada, la marcha desembocaba en la plaza de
la Torraza donde en torno a la hoguera a los inscritos se les daba un bocadillo de
longaniza acompañada de trenza y refresco. Los Gaiters d’a Tierra Plana tocaban las
últimas notas y la música para los más pequeños ambientaba una noche que el tiempo
había respetado con una temperatura agradable sin lluvia ni viento.
La organización se muestra especialmente satisfecha por la participación alcanzada,
por la calidad del trabajo desarrollado por los voluntarios y por la excelente acogida
de los caminantes. La Comarca Hoya de Huesca|Plana de Uesca, a través de su Área
de Cultura y Deportes, junto al Ayuntamiento de Lupiñén-Ortilla quieren resaltar el
magnífico trabajo desarrollado por los vecinos de Lupiñén que han liderado toda la
creatividad de las escenas y la atención a los participantes. Finalmente, agradecen el
patrocinio de las empresas, la colaboración de la organización técnica de la parte
deportiva del Club Atletismo Huesca y la calidad de la intervención profesional de la
compañía Habana Teatro y de los Gaiters d’a Tierra Plana y cuantos otros trabajadores
y empresas han hecho posible el éxito de esta tercera edición de O Camín d’as Almetas.




