La reforma de las paradas de autobús de Oviedo indigna a los usuarios

Oviedo

El ánimo de mejora en el servicio a los ciudadanos que se les supone a los gestores de lo público sufre a veces desvíos por el camino y acaba en ocasiones en chapuzas o incluso desastres. La categoría de lo ocurrido con las paradas de los autobuses urbanos en Oviedo está por definir, pero desde luego dista mucho de satisfacer a los usuarios.

El Ayuntamiento de Oviedo ha acometido la progresiva reforma del mobiliario en las marquesinas habilitadas como puntos de parada de los autobuses de TUA, y la elección no ha gustado nada a los pasajeros. La queja principal tiene que ver con la reducción de las plazas que permiten esperar sentado al autobús. Los bancos de tres plazas que existían hasta ahora han sido sustituidos por un solo asiento que se complementa con unos apoyaderos que, como su propio nombre indica, permiten apoyarse – el trasero o la parte baja de la espalda- pero nunca sentarse.

En la redacción de Radio Asturias hemos recibido la queja de los ciudadanos que se muestran molestos y perplejos por un cambio tan poco afortunado, y que no encuentran explicación al mismo. Una oyente compara el caso de Oviedo con un cambio similar acometido hace tiempo por el Ayuntamiento de Madrid en sus paradas de autobús. En aquel caso el objetivo confeso era evitar que las personas sin hogar se acomodarán bajo las marquesinas a pasar la noche en una especie de cama improvisada. En Oviedo no había tal posibilidad –nos recuerda esta oyente- dado que los bancos ya eran muy pequeños y estrechos. Si esa era la intención, el cambio ha sido “ruin e innecesario”, añade