Los conflictos laborales de Duro Felguera y Arcelor, dos 'patatas calientes' para Asturias

Gijón

Los últimos ajustes anunciados por Arcelor y Duro Felguera han vuelto a enzarzar en sede parlamentaria a Gobierno y Partido Popular. Sobre el ERTE anunciado por el gigante del acero, el presidente Barbón insistía esta semana en que los planes de descarbonización de la compañía están garantizados mientras el principal grupo de la oposición lamenta la pasividad del Ejecutivo ante una situación industrial cada vez más compleja. A la espera de conocer los detalles del despido colectivo anunciado por la ingeniería asturiana, los sindicatos lamentan que los trabajadores vuelvan a pagar el pato de una gestión nefasta.

El gobierno regional se ha ofrecido como mediador en el conflicto de Duro. El director general de Industria comparte la preocupación de los trabajadores de la empresa que ha anunciado un proceso de despido colectivo sin concretar su impacto. Juan Carlos Aguilera pide esperar a conocer las condiciones del ajuste.

También bajan las aguas revueltas en Arcelor Mittal. Empresa y sindicatos retomarán esta semana la negociación del ERTE coincidiendo además con la parada del horno A de Veriña. UGT y Comisiones Obreras no están dispuestos a aceptar las condiciones planteadas por la dirección: garantía salarial del 75% y vigencia hasta finales de 2023.

Como acto de buena fe, reclaman al grupo que abone la totalidad de las retribuciones dejadas de percibir tras la sentencia que declaró nulo el ajuste derivado de la crisis sanitaria que Arcelor aplicó de forma unilateral.