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Cervera aumenta la intensidad

El técnico, que cuenta con seis bajas, cogió las riendas este miércoles tras una primera sesión que fue dirigida íntegramente por el preparador físico.

Álvaro Cervera durante un entrenamiento en El Requexón (Real Oviedo

Oviedo

Cambio de entrenador, pero no de panorama. La enfermería continúa repleta. Segunda sesión para Álvaro Cervera con seis ausencias: Koba, David Costas, Dani Calvo, Marco Sangalli, Miguelón y Borja Sánchez.

Todos ellos saltaron igualmente al césped con playeros, excepto Borja que salía en chanclas, para la charla previa del entrenador. Acto seguido se retiraron junto a Álvaro Cuello y Michi Menéndez para hacer trabajo específico de readaptación. En el caso de Borja Sánchez, ante el Albacete se resintió de su última lesión y, tras abandonar la sesión de ayer, ahora se encuentra pendiente de pruebas médicas.

A la espera de ver cómo evolucionan los días hasta el próximo partido y, con Rodri Tarín sancionado, Oier Luengo es el único central disponible hasta el momento. Abel Bretones, Lucas Laso y Mangel fueron los jugadores del Vetusta que se entrenaron este miércoles con el primer equipo.

Por primera vez desde su llegada, Cervera, se puso a los mandos. Después de una primera sesión suave, la de este martes, que fue dirigida íntegramente por el preparador físico, Adolfo Mayordomo, en esta ocasión, tras unos treinta minutos de activación, el técnico cogió las riendas del equipo.

Su primer ejercicio, cómo no, enfocado a defender las internadas por banda del rival. "Centros laterales y balón parado, en eso consiste básicamente la categoría", recalcó el entrenador a sus jugadores justo antes de empezar el entrenamiento. "Puede haber alguna jugada individual por dentro de algún futbolista que conduzca el balón, pero la categoría se basa en los centros laterales y la pelota parada", incidía Cervera.

Luego el grupo fue dividido en dos. Unos trabajaron una posesión con Roberto Perera que, a diferencia de Pablo Lago, segundo de Jon Pérez Bolo, este sí se encarga de coordinar ciertos ejercicios. El resto de futbolistas realizaron un partidillo en dimensiones reducidas bajo la supervisión de Álvaro Cervera.

Dicho ejercicio estaba compuesto por cuatro equipos que, a su vez, estaban formados por dos jugadores cada uno. Tres equipos jugaban por dentro del campo y el restante estaba por fuera para dar un apoyo. La tarea consistía en que dos equipos jugaban uno contra otro en la mitad del espacio, para sacar el balón lo más rápido posible hacia fuera y atacar sobre la pareja que se encontraba esperando en el otro lado.

Cervera, muy encima de sus jugadores y apretándoles constantemente, trataba de que los defensores presionasen intensamente al poseedor del balón para que no saliese con facilidad. El entrenamiento terminó con dos partidillos en dimensiones reducidas, uno controlado por Cervera y el otro por Perera, llegando a utilizar cuatro porteros en total.

Sin descanso hasta el lunes, que se producirá su debut en el banquillo ante el Málaga, la plantilla se volverá a ejercitar mañana, mientras que el técnico será presentado oficialmente esta tarde en el Carlos Tartiere (19:00 horas).