Caja Rural teme un aumento de la morosidad en el inicio de 2023
Ya detecta una ralentización del mercado de vivienda de segunda mano
El presidente de la Cámara de Comercio de Oviedo (izquierda) y el director general de Caja Rural de Asturias han firmado este miércoles un convenio para facilitar el acceso de las pymes a nuevos clientes. / Ángel Fabián
Oviedo
Caja Rural de Asturias percibe ya un enfriamiento en el mercado inmobiliario derivado de la subida de tipos de interés y teme un aumento de la morosidad a partir del primer trimestre de 2023. Según su director general, Antonio Romero, hay temor por parte de muchos promotores por lo que pueda pasar con las ventas de promociones en curso acordadas antes de la subida de tipos y ya se detecta una disminución del mercado de segunda mano.
Romero describe un contexto de gran incertidumbre en toda la actividad económica, ante los efectos de la guerra en Ucrania, la inflación y la subida de los tipos de interés. Si nos fijamos en el mercado inmobiliario, ya hay signos de enfriamiento. En vivienda nueva, los promotores temen en que no se lleguen a materializar ventas ya acordadas y en el mercado de segunda mano, ya se está constatando el frenazo. Según Romero “la renta disponible que tenían las familias para hacer frente a la compra de esa vivienda se ha reducido y algún promotor manifiesta no saber lo que va a pasar en el momento de entregar estas viviendas, si se le va a caer alguna compra”. Cuando se refiere al mercado de vivienda de segunda mano “sí estamos viendo ya una ralentización”, dice.
En cuanto a la situación de las familias, aún es pronto para percibir un aumento de la morosidad derivada de la inflación y la subida de tipos, aunque el irector general de Caja Rural de Asturias sí está convencido de que “habrá un aumento de la morosidad en el primer trimestre de 2023”.
Caja Rural de Asturias ha dado a conocer hace unos días sus resultados de los tres primeros trimestres de 2022. Llama la atención el fuerte incremento de nuevos clientes en ese periodo, más de 17.000 en una comunidad que pierde población y no hay un aumento significativo de la actividad económica. Antonio Romero lo atribuye a la apuesta por un modelo bancario que mantiene la actividad presencial. Cree que “se está produciendo un cambio en la banca de un modelo presencial a la digitalización, pero eso no se puede hacer de forma brusca, debe convivir la atención presencial con la digital”.
Romero explicó que Caja Rural de Asturias viene registrando estos meses en torno a un centenar de nuevos clientes al día, incluso ha hecho referencia al jueves, cuando las oficinas abren también por la tarde, y las altas rondan los 170 y 180 en ese día.
FIRMA DEL CONVENIO "AGENDADOS"
El director de Caja Rural de Asturias ha firmado este miércoles con el presidente de la Cámara de Comercio de Oviedo, Carlos Paniceres, la renovación del convenio para el desarrollo del programa “Agendados”, iniciado en 2015, que facilita a las pequeñas y medianas empresas el contacto con clientes potenciales. A día de hoy han participado ya en este programa más de 200 empresas. En el último periodo, han sido 40 empresas a las que se han elaborado agendas comerciales con una media de 7 clientes potenciales. El 30 % de ellas, afirman haber logrado clientes nuevos gracias a ello y el 80 % manifiesta tener expectativas de ventas a corto plazo.
