Asturias perdió 5.000 autónomos en una década
UPTA denuncia el aumento de falsos autónomos en actividades de alta cualificación
Oviedo
Asturias ha perdido casi cinco mil trabajadores autónomos en los diez últimos años. Esa caída no es uniforme ni desde el punto de vista territorial y de las actividades. Pierden muchos más las zonas menos urbanas que las grandes ciudades. Incluso aumentan en actividades de alta cualificación profesional, mientras la verdadera sangría se produce en el pequeño comercio. Son datos que ha facilitado de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), que denuncia el incremento de falsos autónomos en actividades cualificadas, como la enseñanza o la sanidad.
El año 2013 se cerró en Asturias con 75.000 autónomos. 2023, con 70.000. El saldo negativo es de 5.000. En ese periodo se han perdido más de 2.600 pequeños comercios. En Oviedo, el saldo negativo de esa década es de 181autónomos, pero la pérdida en el comercio local es de 519. Algo muy similar ocurre en Gijón. La desaparición de comercios en las entidades de menos de 20.000 habitantes tiene unas proporciones mucho mayores.
Pero no todas las actividades tienen un comportamiento tan negativo, hay algunas en las que incluso aumenta año a año el número de autónomos. Son algunas de alta cualificación. UPTA pone como ejemplo aseguradoras, docencia, abogados, podólogos, fisioterapeutas u otras cuyo aumento del trabajo autónomo no se corresponde con el incremento de empresas. El presidente de UPTA, Eduardo Abad, cree que lo que está pasando es que “tenemos un problema de destrucción y cambio del mercado de trabajo tradicional hacia un mercado de trabajo falso que es el trabajo autónomo irregular. Pero no es un problema solo de falsos autónomos, sino también de competencia desleal” hacia empresas que trabajan de forma regularizada. Pide que se produzca en estos casos un cruce de datos entre la Agencia Tributaria y la Seguridad Social que identifique las empresas y la naturaleza de los empleos.
Para 2024, UPTA espera que se mantenga la misma tendencia en Asturias: que aumente el número de autónomos en estas actividades y la cifra total se eleve en el entorno de 250 más. Se mantendrá, por el contrario, la tendencia en el comercio, con el cierre de unos 200 establecimientos pequeños. Para evitar esta sangría, UPTA reclama al Gobierno asturiano un plan de ayuda a la sucesión generacional y la recuperación de las competencias para volver a regular las rebajas.