Sociedad

Unión Española Fotovoltaica reclama al Principado una regulación de los parques de baterías bajo criterios objetivos y no basada en “bulos”

La UNEF ha solicitado una reunión con las consejerías de Ordenación del Territorio e Industria

Instalación para la producción de energía solar / RonFullHD

OViedo

Javier Fernández–Font, vicepresidente de la UNEF (la principal organización de empresarios de la energía fotovoltaica en España) alerta de que las limitaciones planteadas por el Principado a las instalaciones de parques de baterías de almacenamiento energético, suponen, de facto, su prohibición. A pesar del temor expresado por algunos colectivos vecinales, Fernández- Font asegura que no hay base científica real que justifique las distancias de seguridad propuestas en Asturias, respecto a núcleos urbanos o instalaciones ganaderas. Espera convencer al Principado para que no siga adelante con esta regulación. La UNEF ha solicitado ya una reunión con las consejerías implicadas: la de Ordenación del Territorio y la de Industria.

El vicepresidente de la Unión Española Fotovoltaica, confía en que a mediados de septiembre pueda quedar ya fijado el encuentro con los responsables de estas dos consejerías implicadas en la regulación: Ordenación del Territorio (en manos de IU) e Industria (en manos del PSOE).

En todo caso, Javier Fernández – Font considera carentes de fundamento las distancias mínimas para la implantación de parques de baterías propuestas en el Principado (un kilómetro a los núcleos de población y de 500 metros a instalaciones ganaderas o masas forestales autóctonas). Ni científica ni técnicamente, hay base según el vicepresidente de la UNEF para una medida que, entiende, supondrá limitar la llegada de energías renovables; es más, supondrá, dice, una prohibición de facto de los parques de baterías. En ningún país, asegura, existen restricciones como estas.

“Tenemos regulaciones en Reino Unido, tenemos regulaciones en Francia, o tenemos regulaciones en Italia, donde los criterios no pasan más allá de técnicos, de distancias perimetrales de 6, 10 o 20 metros en cada caso, únicamente para poder facilitar el paso entre las instalaciones. Que el gobierno del Principado se plantee una distancia de un kilómetro desde un parque de baterías hasta cualquier punto habitado a la redonda, de facto es prohibir la instalación de parques de baterías en Asturias. Somos una comunidad autónoma muy dispersa geográficamente, por lo tanto, no tiene ningún sentido, insisto, y es que tampoco se apoya a ningún criterio objetivo de por qué hay que hacer esa distancia”.

Javier Fernández-Font dice entender los temores expresados por los vecinos de aquellas poblaciones donde se están tramitando proyectos de almacenamiento energético de este tipo, pero asegura que son infundados. Asegura que los parques de baterías son totalmente seguros.

“Ahora mismo se está utilizando información de que se quema la batería de un patinete eléctrico y se pretende asemejar ese tipo de batería a los parques que se están instalando y no tienen absolutamente nada que ver. Por lo tanto, el temor de los vecinos es muy lógico. Es algo desconocido, no saben cómo funciona. A esta gente hay que explicarles cómo trabajan estos parques, los controles que tienen de temperatura, que se van a desconectar en cualquier momento si hay cualquier pico de temperatura muy alejada de la temperatura de ebullición. Por lo tanto, son instalaciones muy seguras. Con esta gente (los vecinos) hay que hablar, hay que trasladarles tranquilidad y hay que evitar que se pueda caer en la tentación de regular, como te digo, en base a esos bulos de que estos contenedores incendien automáticamente cuando se instalan”

El gobierno asturiano tiene previsto publicar, antes de que acabe el año, el decreto que regulará estas instalaciones. En todo caso, no habrá autorizaciones en tanto no se apruebe esta regulación.