Cura de caballo o jugada magistral
La dimisión de Belarmina Díaz permite a Barbón salvaguardar el pacto de gobierno con IU, pero no desactiva la investigación parlamentaria sobre el accidente minero de Cerredo

-El presidente del Principado, Adrián Barbón escucha la intervención de la consejera de Transición Ecológica, Industria y Comercio, Belarmina Díaz , en el pleno de la Junta General del Principado, este martes. EFE/ J.l.cereijido / J.L.Cereijido (EFE)

Oviedo
Un diputado de Vox, Gonzalo Centeno, le había espetado pocos minutos antes, con la habitual falta de elegancia de la ultraderecha: “es usted un cadáver político”. Esta vez, al margen de las consideraciones sobre la cortesía que se espera en un debate en el parlamento, el de Vox había dado en el clavo. En su siguiente intervención desde la tribuna de oradoras de la Junta General del Principado, la consejera de Transición Ecológica e Industria, Belarmina Díaz, revelaba que el lunes por la tarde había presentado su "dimisión irrevocable" al presidente del Principado, Adrián Barbón. Era la segunda comparecencia de Díaz, en cuatro días, para dar explicaciones en el parlamento regional sobre el accidente que el pasado 31 de marzo costó la vida a cinco trabajadores de la mina de la empresa Blue Solving, en Cerredo (Degaña).
Belarmina Díaz ha resistido 15 días desde el accidente, pero la presión ha acabado por ser insostenible, a medida que la oposición y sobre todo Izquierda Unida –socios de gobierno del PSOE- la señalaban sin ambages en el primer caso, o con más matices en el segundo, pero apuntando incesantemente a la necesidad de depurar responsabilidades políticas –además de judiciales y administrativas- por un accidente laboral que ha costado la vida de cinco personas. Nadie parece dudar ya que la empresa que explotaba la mina de Cerredo es la responsable directa del accidente, porque todos los indicios señalan que estaba extrayendo carbón sin permiso y en unas penosas condiciones de seguridad ajenas a todo protocolo. Pero Díaz estaba señalada porque ella fue la que autorizó en su día, como directa general de Minas del Principado, la concesión a una firma que alguien calificó como "empresa quinqui" por su escaso respeto por la legalidad.
Esto es lo que se ve desde fuera. Tanto o más interesante es la intrahistoria de esta dimisión, y si como parece el objetivo era aplicar un cortafuegos radical, pese al elevado coste, para evitar una ruptura del pacto de gobierno entre el PSOE e IU, ahora que ambas formaciones estaban en la tesitura de partir peras por su posición aparentemente divergente sobre una comisión parlamentaria de investigación .
Belarmina Díaz deja el gobierno pero ha querido dejar bien claro que no es una claudicación o al menos no es el reconocimiento de supuestas responsabilidades por el accidente de Cerredo. Es difícil sostenerlo, pero ha sido muy clara al respecto y ello inspiraba también el tono que le ha dado al mensaje de su dimisión, acusando a la oposición de haber convertido este caso en una persecución personal hacia ella, alejado de todo interés en aclarar lo ocurrido. La dimisión es sin duda la máxima asunción posible de responsabilidades, pero Díaz dice dar el paro para no obstaculizar la investigación, pero insiste en descargar toda la responsabilidad en la empresa. Este martes en la Junta volvió a decir que de haber tenido un solo indicio de esas irregularidades, hubiera ordenado que Bue Solving paralizara su actividad.
La investigación del siniestro no es ya responsabilidad suya, pero en las dos horas durante las que ha aguantado el tipo antes de anunciar la dimisión, la consejera había aportado la única novedad real sobre la investigación del siniestro: los inspectores han encontrar maquinaria y herramientas que apuntalan la tesis de que en la planta del accidente se estaba sacando carbón de forma fraudulenta.
El presidente del Principado ha elogiado la decisión de su ya ex consejera, y lo ha hecho público a través de un video grabado en su despacho y difundido por su gabinete de prensa, en el que ya anuncia que el relevo y la toma de posesión del nuevo titular de la cartera de Industria será la semana que viene para que el Gobierno no se pare, tampoco en la búsqueda de la verdad. Sobre la dimisión de la consejera, sostiene que ha sido una decisión que ha tomado Belarmina Díaz "libre y voluntariamente", para evitar el uso partidista del accidente de Cerredo y para garantizar que se sepa toda la verdad de lo sucedido y no ser utilizada como excusa para la derecha y ultraderecha, que según Barbón no tienen interés en saber la verdad s sino solo de erosionar al gobierno de unión progresista.