Un Sporting en cuadro suma un meritorio punto y roza la victoria

Gijón

El Sporting consiguió ante la UD Las Palmas un punto de los de darse con un canto en los dientes (0-0), dadas las circunstancias. Con un once ultradefensivo por momentos, sin mucho más margen de elección por la plaga de bajas relevantes que asola al equipo, los rojiblancos consiguieron un meritorio empate frente a un equipo que llegaba a El Molinón segundo y que decepcionó, en parte también por la buena labor defensiva del equipo de Borja Jiménez, que sigue sin conocer la derrota como entrenador del Sporting.

Primer empate de la temporada, que pudo haber sido mejor porque, aunque el bagaje ofensivo del Sporting fue muy escaso, primero Amadou y luego Guille Rosas tuvieron el gol de la victoria en sus botas. El disparo de Amadou se fue muy lejos del marco; el de Guille Rosas, ya en el minuto 95, lo cazó el meta amarillo cuando se colaba. Para ser justos, también hay que apuntar que una vez más Rubén Yáñez mantuvo el resultado gracias a una de las suyas: una manopla espectacular ante un remate a bocajarro de Lukovic, tras una gran acción individual de Pejiño por la banda.

Lukovic fue el gran protagonista del partido: tuvo esa ocasión, otro disparo a la madera y vio una tarjeta roja por golpear con su bota en la cara de Perrin después de un robo de balón del defensa rojiblanco, amortiguada a amarilla tras la revisión en el VAR. Otro error de apreciación de Muresan Muresan, en un nuevo recital de un árbitro que, al menos en los partidos contra el Sporting, siempre ofrece recitales de desaciertos.

Era un partido muy difícil para Borja Jiménez, por el potencial del contrario (aunque baja su rendimiento fuera de casa) pero sobre todo por el tetris que tenía que realizar para configurar la alineación. Eran prácticamente 'habas contadas', especialmente en ataque. Había otras alternativas, como mantener a Nico Riestra tras su buen hacer en la Copa del Rey o darle por fin una oportunidad en Liga a Oscar Cortés, pero el técnico abulense apostó por doblar laterales, con Guille Rosas y Pablo García por delante de Kevin Vázquez y Diego Sánchez en fase ofensiva, aunque a la hora de defender el equipo llegaba a plantar una línea de seis.

Tras un inicio intenso, con una aparición en ataque de Pablo García fruto de una buena presión alta y de una concesión de la defensa canaria, y tras la ocasión de los canarios salvada por Yáñez, el partido entró en una fase anodina hasta el descanso. Tardó en animarse en la segunda mitad, con muchas interrupciones, una de ellas por la lesión de Kevin Vázquez, que se suma al ya extenso parte médico. Fue sustituido por el canterano Manu Rodríguez, debutante en Liga.

El Sporting estaba resistiendo bien, pero no había chutado ni una sola vez entre los tres palos. No lo consiguió Amadou en una ocasión clarísima, en la que el delantero mandó al tercer anfiteatro un gran pase de Pablo García, rematado a la media vuelta, pero que debería haber buscado portería. Y ya en el añadido, el portero Horkas evitó sobre la línea el disparo a colocar de Guille Rosas que hubiera dado la victoria al Sporting. Pero el empate, dadas las circunstancias, es un buen botín para el equipo gijonés.