La Columna de Carlos Arcaya: «La restauración de la memoria de las víctimas del franquismo»

La aparición de restos en dos fosas comunes del cementerio de Alicante es un buen principio en el camino de la restauración de la memoria de las víctimas del franquismo. En este caso, a diferencia de lo sucedido en Paterna, el camino hasta llegar a este punto ha sido proceloso. Se han abierto fosas sin encontrar resto alguno o, incluso, se ha encontrado la tierra removida. En el caso de las fosas 20 y 36, los primeros trabajos también han sido complicados, pero finalmente se pudo localizar estos cuerpos, alguno de ello con signos evidentes de violencia, como orificios de bala. Algunos familiares ya han mostrado su alegría en redes, aunque se contienen y serán cautos hasta que los análisis de ADN no terminen por demostrar que esos restos son los de sus padres, sus abuelos o sus bisabuelos. Y en ese momento, pero no hasta entonces, cuando cada familia tenga en su poder esos retos, el camino se podrá dar por concluido. Pero este es solo un capítulo de un libro de recuperación emocional al que le quedan otros muchos por escribir.