Bienvenidos a Argelia
Al PP, que no se ha distinguido por su celeridad al denunciar los errores de la legislatura, le ha faltado tiempo para bramar contra la arribada de las pateras
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
"La línea roja" de Matías Vallés (10/06/22)
Nadie se levantaría a estas horas para tomarse una pausa, así que vamos con un asunto de alta tensión.
De repente, el Gobierno nos ha obligado a mirar a los mapas.
Gracias a la geografía hemos descubierto que estamos tan cerca de Argelia como del resto de España, más próximos a Argel que a Madrid.
Tal vez no era el momento más adecuado para que España se peleara con Argelia.
No puede ser casualidad que el anuncio de la ruptura por parte de Argel coincida en el calendario con la llegada de seis pateras en un día a Balears.
Si fuera una embarcación aislada, daríamos la bienvenida a nuestra tierra a los argelinos.
Sin embargo, seis embarcaciones por rudimentarias que sean, obligan a sustituir la fraternidad del vecindario por la identificación.
Bienvenidos a Argelia, cabe congratularse desde esta orilla, como si ya formáramos parte de nuestra realidad vecina.
Al PP, que no se ha distinguido por su celeridad al denunciar los errores de la legislatura, le ha faltado tiempo para bramar contra la arribada de las pateras.
La derecha sabe que la izquierda pierde las elecciones por su indefinición ante las mafias migratorias.
Es una constatación impopular, pero los progresistas siempre han preferido caer simpáticos a gobernar.




