Llamada de auxilio de los residentes de Baleares en contra de la masificación turística
"SOS residents" ha querido cambiar esa llamada de auxilio que era de los hoteleros y ahora está en manos de los residentes

Cadena SER

Palma
Colas para acceder al centro de Palma, atascos kilométricos para ir a Formentor, Es Trenc o incluso a ver la puesta de sol en Sa Foradada, en la Serra de Tramuntana.
Se ha abierto el debate sobre la saturación este verano en Baleares. Tal es la situación que la campaña lanzada por los empresarios del sector turístico durante la pandemia, "SOS turismo", ahora diferentes voces críticas la han rebautizado por "SOS residents", se ha querido cambiar esa llamada de auxilio que era de los hoteleros y ahora está en manos de los residentes.
Hay voces en contra sobre esta campaña en redes sociales porque hay que tener en cuenta que casi la mitad de los ingresos económicos anuales Baleares provienen del turismo.
El debate es sobre si hay que fijar o no un tope al número de visitantes.
Todo esto en una semana en la que el Consell de Mallorca ha pasado por una crisis política por el patrocinio del estadio de fútbol... una vez más, la promoción turística era la cuestión.
Masificación
El GOB Menorca lanza un mensaje de alerta ante la masificación turística que vive la isla, y advierte que se están sobrepasando todos los límites de ocupación, ofreciendo una "degradación" de la imagen de Menorca.
El responsable de la Ordenación del Territorio del Gob, Miquel Camps, explica que Menorca está batiendo este verano todos récords de masificación, de número de vehículos y también de embarcaciones náuticas. Afirma que hay un estudio que marca la capacidad náutica de la isla y que desde hace diez años se está superando. Por eso, asegura, no tienen sentido proyectos como el que prevé duplicar la lámina de agua en el puerto deportivo de Addaia. Camps pide un cambio en la promoción turística de la isla.
El Gob ha presentado alegaciones ante Ports de les Illes para que reconsidere algunas actuaciones previstas, como la creación de nuevas zonas de aparcamiento, rampas o espacios para almacenar embarcaciones. No es de recibo seguir promocionando que haya más barcas cuando sabemos que superamos con creces la capacidad náutica", ha señalado.
Camps ha solicitado también al Govern balear que resuelva "estas incongruencias sinsentido" que se traducen en una "degradación" de la imagen de Menorca y una afectación negativa diaria a los prados posidonia.
Alquiler de yates
Desde un millón de euros y en adelante se pueden encontrar embarcaciones de entre 50 y 60 metros de eslora para alquilar por una semana. Hablamos de yates que incluyen un servicio con todo incluido: combustible, personal de servicio, patrón, y todo tipo de servicios que el cliente exija.
Es la radiografía que realizan desde la patronal de empresas náuticas de Baleares, su presidente Jaume Vaquer, explica que este tipo de contratos de alquiler la discreción es muy importante. Nunca las firma la persona que disfrutará el yate y se evita en todo momento que aparezca su nombre.
Otro aspecto que llama la atención, es que 50 metros de eslora es mucho para alquilar un amarre. En las Islas no suelen atracar barcos de estas dimensiones que se alquilan para recreo. El propio yate tiene otro barco auxiliar que permite ir al puerto para ir de compras o a cenar.
Además, hay personas dedicadas solo a satisfacer los deseos de los más poderosos. Por ejemplo, reservar una mesa en un restaurante de lujo en Ibiza, puede llegar a costar hasta 60.000 euros, solo la reserva.
Ya si hablamos de precios más económicos, de entre 50.000 y 100.000 euros semanales, se pueden encontrar yates con esloras de entre 20 y 30 metros. Con estas dimensiones sí pueden atracar en puertos con precios que rondan los 500 y hasta 3.000 euros el día.
Y por último, desde los 10 y 15 metros de longitud se pueden alquilar barcos desde los mil euros por día. Aunque hay que sumarle el depósito de combustible y otros 3.000 euros del amarre por día.
Posidonia
El grupo ecologista GOB continúa con su campaña de sensibilización SOS Posidonia. Miembros de la entidad recorren las playas de toda Mallorca para concienciar tanto a los bañistas de la importancia de la conservación de esta planta endémica en el Mediterráneo.
Una campaña se inició en julio y continúa durante este mes de agosto. Esta semana han estado en Palma y la próxima estarán en el Puerto de Sóller.




