Bajan a la mitad las denuncias por ruidos en Sant Josep

IBIZA

Las estadísticas de la Policía Local de San Josep constatan que este año las denuncias por ruidos, especialmente las que se originan en las casas del municipio, están registrando un fuerte bajón.

Desde el Ayuntamiento de Sant Josep cifras absolutas, una vez superado el mayor de mayor actividad turística de la temporada se han presentado la mitad de quejas que todo el año pasado, cuando se alcanzó la cifra de 1.852, el máximo desde el final de la pandemia. Comparando las denuncias hasta septiembre de 2021, 1.400, con las interpuestas este año, 945, el descenso es de un 32%.

"Un municipio menos ruidoso es un municipio donde mejora la convivencia y estamos muy contentos de seguir reduciendo las molestias que sufren por esta causa tanto los vecinos como los visitantes, destaca la Concejala de Gobernación, Pilar Ribas. Reconocque que "teníamos un problema especialmente en las casas y zonas de población dispersa del municipio pero estamos viendo que es en este ámbito donde más están bajando las quejas, lo que es una muy buena noticia y debemos felicitarnos porque el civismo se está imponiendo frente a los que no les preocupa el descanso de sus vecinos, cada vez menos"

En estos ocho meses se han recibido 635 avisos por exceso de ruido en casas frente a las 1.100 del año pasado, lo que supone una caída del 42,8% y de más del 60% si se compara con el conjunto de 2021. La estadística distingue entre las quejas por ruidos originados por un establecimiento o negocio (219), que en los últimos años han dejado de ser la principal causa de denuncia y representan el 15% del total, y las causados en viviendas, por fiestas con la música elevada sobre todo, pero también por otras razones como alarmas o uso de maquinaria.

Este tipo de incidencia es la principal causa de ruido en el municipio desde hace algunas temporadas y se concentra especialmente en agosto, con 480 queja sque este año han caido hasta las 210 menos que las 243 recibidas en julio que son los meses que concentran el mayor número de denuncias.

A raiz de estos avisos, la Policía Local ha interpuesto 90 denuncias por infracción de las ordenanzas municipales de convivencia y que contemplan una sanción directa de 12.000 euros en los casos en que se incumple el requerimiento de cesar los ruidos molestos y es la que se dirige al responsable de una fiesta en un domicilio, el propietario de la vivienda en último término.

En cuanto a la persecución en los establecimientos ruidosos, se han derivado cerca de 60 denuncias, 49 de ellas por no disponer o haber manipulado el limitador acústico que debe tener instalado cualquier negocio que disponga de música. También se ha procedido al precinto cautelar del equipo musical –que se mantiene mientras no se certifica el cumplimiento de la normativa– de 37 establecimientos del municipio.

Esta campaña se ha destinado a un agente específicamente al control de las actividades ruidosas y debidamente acreditado por esta tarea, con especial atención a los locales más conflictivos del municipio pero sin descuidar la vigilancia del resto de negocios. Esta asignación ha estado acompañada de una mejora del equipo técnico, con la adquisición de un sonómetro y un nuevo equipo informático dotado de software para monitorizar el funcionamiento de los equipos registradores acústicos.

Los controles sonoros e inspecciones se realizan en colaboración con el resto de servicios técnicos municipales, de las áreas de Medio Ambiente y Actividades específicamente, y tienen la función no sólo de perseguir las infracciones sino también establecer vías de cooperación con los establecimientos del municipio para implicarles en el respeto a las normas de convivencia para concienciar a los responsables de estos negocios sobre la conciliación de su actividad con el descanso de los vecinos y vecinas.

Además de las quejas por rumores a viviendas y negocios, la Policía Local ha recibido en lo que llevamos de año 45 llamadas por ruidos a la vía pública -un tercio de las registradas en 2021- y otras 32 por los ruidos de obras en curso.