El turismo de congresos de Palma arranca el que sería el mejor de sus últimos años
Ya sin restricciones, el calendario está lleno de eventos por celebrar, que, además, repercuten en la planta hotelera de la capital, abierta al 70%
Palma
El turismo de congresos ha subrayado el pasado año como el de la recuperación y espera un 2023 incluso mejor. Así lo avala el calendario lleno de eventos que acogerá el Palau de Congressos de Palma. Su director general, Ramon Vidal, ha señalado que no hay previsiones exactas sobre la facturación, pero sí tienen claro que superarán lo que ha sido un "gran 2022".
Y es que Vidal ha aludido a un primer cuatrimestre de 2022 "complicado" en el sector dadas las limitaciones por pandemia que aún existían; sin embargo, la recuperación llegó rápidamente a partir de esa fecha, retomando eventos que tuvieron que cancelarse anteriormente y dejando, finalmente, unas cifras que superaron las de 2021 y 2019.
"Fue un comienzo bastante perdido, pero se recuperó el mercado a partir de abril, con eventos que arrastrábamos de 2020 y 2021; por tanto, el balance es positivo y superior a los tres últimos años", ha explicado.
Desde esta semana, el propio Palau arranca un año lleno de congresos por acoger, celebrados por empresas tecnológicas y de vehículos, los primeros, y que se extenderán a más sectores en primavera.
Los alojamientos en Palma, a rebufo de los eventos
Estas buenas previsiones de Palau de Congressos repercuten favorablemente en los alojamientos de la ciudad, y es que los hoteleros de Palma cifran en un 70% la apertura de la planta total. Han concretado que todavía siguen llegando extranjeros al centro de la ciudad, pero los establecimientos de las afueras y de la zona del puerto acogen a día de hoy a esos asistentes a los eventos que se celebran. Este calendario, según Javier Vich, presidente de los hoteleros de Palma, hará de estos primeros meses del año "una etapa mejor a la de 2022".
Sobre dicho año, Vich ha señalado que ha arrojado cifras de facturación inferiores a las de 2019; básicamente, debido a un complicado inicio y a un frenazo en las reservas en los dos últimos meses. Algo que lamenta, ya que entre abril y octubre, el comportamiento "ha sido muy bueno, hubo una recuperación en Semana Santa que no nos esperábamos".
De cara a la previsión de este nuevo año, el presidente de los hoteleros de la capital se ha mostrado cauto debido la crisis de precios actual. "Siendo optimista, la temporada turística estará marcada por cómo se comporten estos primeros meses de 2023 indicadores como la inflación, la cesta de la compra, el precio de la energía y el euríbor", no ya por lo que estos afectan al propio sector de manera directa, sino por cómo los afrontarán los potenciales clientes y mercados emisores.