Vox se pelea como un partido cualquiera
La crisis surge del enfrentamiento radical entre Jorge Campos y Fulgencio Coll, que honra al segundo
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La línea roja - Matías Vallés (19/01/2023)
Palma
Vox ha escenificado un vodevil o 'voxdevil' interno en Balears.
Se demuestra así que la ultraderecha moderada se pelea como un partido cualquiera.
Se consideran excepcionales, y son vulgares.
La crisis surge del enfrentamiento radical entre Jorge Campos y Fulgencio Coll, que honra al segundo.
No se soportan.
La situación insostenible se ha saldado como en los tiempos de Salomón, al igual que ocurre en los partidos democráticos que detesta Vox.
Jorge Campos ha sido apartado de la jerarquía en Palma, como Ortega Smith en Madrid.
Campos recibe la proverbial patada, camuflada por su candidatura ya sin presidencia al Parlament.
Es decir, aspirante a liderar la autonomía que Vox pretendía abolir.
Fulgencio Coll será el candidato a Palma y me permitirán que obvie a una presidenta testimonial del partido.
Ahora viene lo bueno.
Si PP/Vox ganan las autonómicas, que es la única posibilidad de la derecha, Campos será vicepresidente del Govern al igual que ocurre en Castilla y León, con su coche oficial y todo.
Y a cambio de apoyar la presidencia de la comunidad para el PP, la contrapartida de Vox será exigir la alcaldía de Palma para el general Fulgencio.
¿Verdad que es emocionante, o como mínimo escalofriante?
