Pioneras del feminismo en las islas: "Hemos avanzado mucho, pero el mensaje no ha cambiado del todo"

Palma

Hace 44 años 200 mujeres participaron en la primera manifestación feminista de Mallorca. El asesinato de tres mujeres a manos de sus parejas provocó la indignación entre los colectivos feministas de entonces. El 5 de febrero de 1979 los colectivos Pelvis, Mujeres Independientes y el grupo para la Liberación de la Mujer salieron a la calle para gritar contra el abuso machista y iniciar un camino que, ni mucho menos, está cerca del final. Un recorrido por el feminismo de los últimos 40 años retrata los avances, pero también las sombras que quedan por iluminar.

En la plaza de Cort, Hoy por Hoy Mallorca ha reunido este miércoles algunas de esas mujeres que salieron a la calle para protestar contra los abusos a los que era sometida la mujer, en una sociedad que empezaba a salir del franquismo. Leonor Taboada, escritora y periodista, era una de las activistas del colectivo Pelvis. Recuerda perfectamente la rabia que sintió tras el asesinato de una de esas mujeres, Juana García. Había ido al juzgado para denunciar que su marido le amenazaba con quemarla viva. No obtuvo respuesta y terminó muriendo quemada asesinada por su pareja.

Jiména Jiménez era otra de las activistas que salió a la calle ese día. En aquel momento la lucha feminista estaba comenzando. Los asesinatos de esas mujeres fueron un punto de inflexión, la palanca de cambio que les hizo tomar la calle para dar a conocer una realidad que, hasta entonces, muchas veces se quedaba en la casa, de puertas adentro.

Para estas activistas, el feminismo ha evolucionado mucho. Se han conseguido muchos avances, pero la realidad desgraciadamente sigue dejando mujeres y niños que mueren a manos de sus parejas o padres. Jiménez cree que, además de la visibilización de los casos, lo más importante es la educación. La educación en feminismo y libertad de los niños y niñas desde que son pequeños, para que aprendan a saber cual es el valor de las mujeres. Taboada valora que se han hecho muchas cosas, pero no lo bastante. El mensaje, dice, "no ha cambiado del todo".