Sant Antoni cederá la casa de Sant Mateu como alojamiento para diez agentes de la Guardia Civil

Ibiza

Una decena de agentes de la Guardia Civil que llegarán a Ibiza como refuerzo en la operación verano se alojarán en la casa propiedad del Ayuntamiento de Sant Antoni en el pueblo de Sant Mateu. Lo ha anunciado el alcalde de la Villa de Portmany, Marcos Serra, tras la reunión de la junta local de seguridad en la que se ha hablado del dispositivo que se pondrá en marcha en el municipio en temporada turística y se han valorado los datos del verano pasado con un descenso de la delincuencia. Bajaron los robos y también las denuncias por venta ambulante en comparación con las cifras de 2019.

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Recordemos que ese inmueble fue una donación al Consistorio y que tuvo que desalojarse con orden judicial el año pasado, ya que había sido okupada. Serra dice que la vivienda tiene capacidad para 17 personas "aunque este número podría ser excesivo para la Guardia Civil, puesto que se tendrían que compartir habitaciones". Ha sido reformada y amueblada y se está pendiente ahora de la firma del convenio con la Guardia Civil en las próximas semanas para que este inmueble dé respuesta a las necesidades de alojamiento de los agentes de la Benemérita

El director insular del Estado, Enrique Sánchez, destaca que para hacer frente al problema de la vivienda que seguirán teniendo colaboración de los hoteleros que ofrecerán habitaciones a precios asequibles para poder dar respuesta a las necesidades de alojamiento de policías y guardias civiles.

Sánchez avanza que el dispositivo de refuerzo será el mismo que en 2022 "con la cifra más alta de efectivos de los últimos años". Se incorporarán el 1 de junio y permanecerán hasta finales de septiembre.

Asimismo, asegura que se contará con presencia puntual de unidades especializadas como la Unidad Greco, agentes del Seprona o de la Guardia Civil del Mar.

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El plan de seguridad del Ayuntamiento volverá a incluir las unidades que vigilan las playas, los drones y la unidad canina. Serra dice que se hará un "esfuerzo económico" para que los efectivos policiales puedan hacer horas extraordinarias y tengan más presencia en las zonas turísticas. El alcalde reconoce que hace falta ampliar la plantilla policial que ahora es de 57 agentes hasta llegar a los 80. Espera contar con partida presupuestaria a final de año para ir dotando estas nuevas plazas.

Asimismo, Sant Antoni habilitará un nuevo espacio para el servicio del SATE en el antiguo kiosco cedido por Ports de Baleares, aunque no estará operativo esta temporada.