El Baleares vuelve a tropezar (0-0) pero depende de sí mismo para salvarse

Mallorca

Era un partido señalado en color rojo para el Atlético Baleares. Último choque en casa de la temporada, permanencia en juego y un llamamiento durante toda la semana para llenar el Estadi Balear. Y así fue: la afición respondió y fueron casi tres mil las personas que se dieron cita en el feudo blanquiazul. Sin embargo, no acompañó el resultado de su equipo, que se estrelló ante un muro llamado Miguel y empató a cero frente al Calahorra.

Un resultado que parecía dramático para los intereses balearicos, pero haciendo cuentas, y debido a un doble enfrenamiento directo entre los cuatro equipos que pugnan con el Baleares para la salvación, el elenco de 'Tato' depende de sí mismo para mantenerse otra temporada más en Primera RFEF. Es decir, ganar en Las Gaunas frente a la SD Logroñés sería suficiente.

El de hoy fue un partido marcado por la falta de eficacia ofensiva por parte de los mallorquines, que arrancaron el choque imprimiéndole mucha intensidad a su juego. Enfrente, un Calahorra que entró también valiente al partido.

Sin embargo, los locales rápidamente se hicieron con el dominio del partido y el primer aviso llegó en el minuto once con un centro de Marc Baró desde el sector diestro que buscó el remate de Iñaki Olaortua, pero la zaga visitante estuvo providencial para evitarlo. Acto seguido, en el saque de esquina posterior, otra vez los mismos protagonistas se iban a encontrar, el vasco esta vez sí pudo conectar con el balón, pero su cabezazo no encontró portería.

En la primera mitad, los de 'Tato' explotaron, sobre todo, los espacios en la banda izquierda con Baró y Víctor Narro. Acciones que generaron ciertos estragos, aunque no muy importantes, en la portería de Miguel. Por su parte, el Calahorra no lograba siquiera pisar el área de Lucas Díaz; una tónica que se repitió durante los primeros 45 minutos. A este respecto, entre la línea de defensa de los locales destacó un gran David Navarro.

Llegados a la media hora, Narro, Dioni Villalba y Dani Nieto, que volvía a la titularidad, tuvieron las suyas para adelantar al Atlético Baleares, pero la falta de ideas en algunas ocasiones y la carencia de precisión y un gran Miguel en otras hacían que las intentonas no se materializaran.

Los minutos fueron pasando y el nerviosismo sobre el césped y las gradas se comenzaba a palpar. La insistencia balearica en búsqueda del gol existía, pero no así el acierto, con lo que se llegó al final del primer asalto con 0-0 en el marcador.

En el segundo tiempo, el Atlético Baleares volvió a arrancar con mucha intensidad y el guion se mantuvo: dominio y llegadas de los locales y prácticamente nulo el ataque del Calahorra. En el 50', una gran arrancada desde el sector zurdo de Dioni acabó con un buen disparo de este, pero Miguel, con la yema de los dedos, logró desviar el balón a córner. En ese saque de esquina, los balearicos sacaron en corto, el cuero le llegó a Nieto, que disparó con su zurda desde la frontal del área pero su lanzamiento se fue desviado.

Durante los primeros 15 minutos, el elenco local acumuló varias llegadas (algunas con más peligro que otras) y daba la sensación de que en algún momento el tan ansiado gol iba a acabar llegando.

Sin embargo, las ocasiones del Baleares se vieron reducidas tras el minuto 60 y fue el Calahorra, a base de centros y con algún disparo puntual, el que generó pequeños sustos en el seguidor balearico.

En el minuto 66, 'Tato' decidió agitar el árbol y dio entrada a Víctor Pastrana por Toni Ramón. Los locales lo siguieron intentando pero de nuevo, sin éxito. De esta manera, los nervios y las precipitaciones empezaban a hacer mella en los jugadores.

Ya en el 76', llegó uno de las más claras del partido: buena jugada individual de Dioni, que le cede el balón dentro del área a Nieto, que se saca un chute potente y raso, pero Miguel volvió a mostrarse providencial para mantener el 0-0 en el electrónico.

Los últimos minutos ya fueron de un Baleares volcado y buscando el asedio de la portería contraria. 'Tato' quemó sus cartuchos con las entradas de 'Miguelete', Miguel Ángel Cordero y Carlos Julio, pero entre la zaga visitante y Miguel achicaron aguas en todo momento.

De esta manera, se llegó al final de los 90 minutos con el mismo resultado del inicio. Frustración e impotencia tanto en el verde como en la grada y precisamente desde una parte del Estadi Balear se escucharon cánticos contra la dirección del club. Sea como fuere, el Atlético Baleares depende de sí mismo para salvar la categoría. Todo pasa por ganar el próximo sábado a la SD Logroñés.