Los asentamientos ilegales por la falta de vivienda y la dejadez de los propietarios de terrenos traen de cabeza a los efectivos antiincendios

Ibiza

En Ibiza hay preocupación por el riesgo de incendios que suponen los asentamientos de personas que viven en vehículos o tiendas de campaña en zonas forestales, que están suponiendo un quebradero de cabeza para los efectivos del Ibanat y también por la dejadez de los propietarios de terrenos y viviendas diseminadas, que no toman las medidas de autoprotección necesarias.

El técnico de la Conselleria balear de Medio Natural, Miguel Soriano, explica que es otra derivada más de la problemática de la vivienda en la isla, que hace que la mayoría de los incendios forestales que se han registrado en Ibiza en lo que va de verano se deban a negligencias de este tipo.

Soriano dice que otro caballo de batalla lo tienen en la falta de gestión forestal de la mayoría de propietarios de fincas en interfaz urbano-forestal. Las zonas más conflictivas son las viviendas diseminadas de la costa oeste de Sant Josep y las urbanizaciones de Siesta en Santa Eulària; Cala Salada y Can Germà en Sant Antoni; y la Cala San Vicente, Illa Blanca y Allà Dins en Sant Joan.

Desde el Ibanat destacan que la gran cantidad de viviendas diseminadas también tiene una lectura positiva, y es que cuando se desata un incendio, el 112 recibe gran cantidad de llamadas de aviso, lo que permite una respuesta más rápida.

Soriano recuerda que el Ibanat cuenta con dos brigadas equipadas con dos vehículos tanqueta, un helicóptero y un avión anfibio para luchar contra los incendios en las Pitiusas, además del apoyo de los efectivos del Parque insular de Bomberos.