Baleares pone tope a las viviendas de menos de 90 metros cuadrados con la creación de la nueva figura: vivienda de precio limitado
La previsión de los constructores y promotores es poner a disposición unas 3.000 viviendas en Baleares

Pisos de Palma / Cadena SER

Palma
El Consell de Govern ha dado luz verde al decreto ley de medidas urgentes en materia de vivienda del Ejecutivo, con el cual se pondrá tope a los precios de los inmuebles, gracias la creación de la nueva figura: la vivienda de precio limitado. La previsión de los constructores y promotores es poner a disposición unas 3.000 viviendas en Baleares con esta nueva medida, unas cifras que el Govern da por buenas.
Serán pisos de hasta 90 metros cuadrados, tendrán que ser la residencia habitual y podrán destinarse a la venta o alquiler, siempre y cuando se mantenga la figura de vivienda de precio limitado. La consellera de Vivienda, Marta Vidal, asegura que las personas que podrán acceder al inmueble deberán ser residentes de las Islas y no tener otra propiedad a su nombre.
El objetivo es fomentar la reconversión de locales comerciales y administrativos, establecimientos turísticos obsoletos, sacar al mercado viviendas de alquiler turístico ilegal, crecer en altura, la división de viviendas ya existentes, la construcción de inmuebles en suelo público, y la creación de viviendas inacabadas. Desde el Govern dejan claro que con todo se quiere evitar la especulación.
Por otro lado, se crean nuevas definiciones en materia de vivienda: "coalojamiento" y "covivienda", con el fin de adaptarse a las nuevas necesidades de estudiantes, personas mayores o trabajadores temporales.
Los precios de compra para viviendas ya existentes oscilarán entre los 100.000 y 240.000 euros, y para obra nueva entre los 120.000 y 285.000 euros.
Mientras que los alquileres rondarán entre los 385 y 905 euros, para los inmuebles ya existentes. En el caso de los de obra nueva, el alquiler oscilará entre los 455 y 1.000 euros. Todo ello en función de los metros cuadrados y de la zona donde se ubique el inmueble.
El documento también incluye sanciones que pueden alcanzar los 90.000 euros, la infracción más grave, como es la venta o alquiler por un precio superior al fijado o su comercialización turística, por ejemplo.
La previsión del Govern es seguir trabajando con la creación de un plan de vivienda. Continuar analizando la efectividad de esta primera medida, analizar el suelo vacante con los consells insulars, fórmulas de colaboración público-privada para la construcción de vivienda pública o fomentar el alquiler. Unos retos a futuro que según la consellera irán algo más despacio.
Un decreto que se iba a aprobar el pasado viernes en Consell de Govern con el objetivo de poder introducir nuevas disposiciones para la lucha contra el alquiler turístico. La idea es poder sacar al mercado las viviendas vacacionales que se ofertan de forma ilegal.
De este modo, se ha introducido en el decreto una modificación de la Ley de Turismo para luchar contra la oferta ilegal que dota a la inspección técnica de la capacidad de clausurar temporalmente la vivienda.
Desde el Govern, su portavoz, Toni Costa, habla de día histórico y ha criticado las políticas, dice, fracasadas de los últimos ocho años en materia de vivienda del anterior equipo de gobierno.




