1-3. El Intercity descose al Ibiza

Ibiza

El día que podía colocarse líder de la Primera RFEF ha llegado la primera derrota de la temporada de la UD Ibiza, errática, imprecisa y maniatada por un serio Intercity con las ideas más claras, que ha marcado muy pronto para ponerse por delante y ha sabido jugar con el marcador a favor y con la ansiedad celeste. Y es que la UD se ha visto condicionada por el mal partido de algunos futbolistas, apenas ha generado ocasiones claras a diferencia de los últimos encuentros en Can Misses y ha dado facilidades en defensa.

De hecho, el conjunto alicantino ha dispuesto de varias contras para hacer un agujero todavía mayor a la defensa local en el primer tiempo pero no ha elegido la mejor opción cuando ha pisado el área ibicenca.

En el segundo acto, cuando el Ibiza buscaba la igualada otra contra, con otra contra de libro, dobló su renta. Los locales recortaron enseguida para darle emoción al último cuarto de hora,. Se volcó en ese tramo la UD para la igualada que no llegó y una acción infantil terminó de confirmar la derrota . El mejor escribano echa un borrón y no ha sido el domingo del conjunto de Guillermo Fernández Romo al que le han chirriado algunas piezas, atrás y arriba y ha cometido errores individuales de bulto.

El plan del Intercity era claro, tapar la salida de la UD, colocando siempre un jugador presionando a Eugeni y buscar las cosquillas por fuera. El plan de la pizarra no pudo salir mejor. En el arranque los visitantes estaban mucho más intensos y aunque Soko tuvo un remate que no encontró portería, la iniciativa era del Intercity con dos arrancadas por banda que dejaban claras las intenciones. En uno de esos intentos la jugada acabó en saque de esquina y el lanzamiento lo cabeceó solo Emilio Nsue, aprovechando la indecisión de la zaga celeste. Solo se habían jugado seis minutos y la afición que pobló las gradas de Can Misses intuyó que la fiesta del liderato podía agriarse y no se equivocó.

El Intercity seguía a lo suyo, limitar la fluidez local que dejaba como únicos argumentos ofensivos las arranadas de Soko por un costado y las incorporaciones de Javi Jiménez por el otro. Los centros laterales no generaban problemas a los solventes centrales visitantes. Al Ibiza le faltaba encontrar entre líneas a Rubén Díez, que no siempre repartía bien, y sus dos referentes ofensivos, Cedric y Arroyo, novedades en el once inicial, no se conectaban con el partido y estuvieron perdidos. Cedric sigue sin encontrar su espacio y no está siendo ese nueve rompedor y goleador y Arroyo ha perdido la magia de los primeros partidos.

Así que todo el caudal ofensivo de los de Romo en el primer tiempo fueron un par de inocentes cabezazos en jugadas a balón parado que detuvo sin problemas Manu Herrera y una ocasión clara tras una buena acción de Soko que Rubén estrelló contra Herrera. Todo lo demás fueron imprecisiones y errores en las entregas, sin claridad en la circulación y sin darle ritmo al juego. Atasco generalizado, propiciando que el Intercity estuviera cada vez más cómodo sobre un césped demasiado tierno.

Tras el descanso, el Intercity seguía amenazando en cada salida , aunque el Ibiza con algún arranque de genio y siempre con Soko como amenaza, tuvo un par de llegadas peligrosas, aunque Cedric no estuvo fino en una de ellas y Arroyo se topó con la cabeza del central Vadik, un muro inexpugnable durante todo el encuentro.

Romo movió el banquillo dando entrada a Suleiman por Rubén Díez y a Tienza por otro pivote, Jesús Alvarez. El Intercity seguía avisando obligando a intervenir al portero Sequeira, y tras dos avisos, Aaron Piñán, una pesadilla para la defensa ibicenca, aprovechó una buena acción de Cristo, con error de Javi Jiménez a la hora de despejar y fusiló a Sequeira.

El Ibiza pudo recortar enseguida, tras una arrancada de Soko que le dio el gol hecho a Arroyo que empujó a placer en una acción que la defensa visitante reclamó fuera de juego.

El entrenador local se jugó sus últimas cartas dando entrada a Gallar y a Obolskii. El ruso nada más entrar obligó a Herrera a intervenir. Suleiman muy activo tuvo dos disparos que no encontraron portería. Por primera vez en el encuentro sufría el Intercity, pero el Ibiza siguió jugando con demasiada ansiedad y facilitaba la defensa del Intercity, que capeó el temporal, jugando con el reloj y parando continuamente el juego. El plan b también le funcionó, evitó más oportunidades claras de los locales, limitadas a algunos centros al área.

Con el tiempo cumplido, Escassi cogió el balón con la mano creyendo que el árbitro había pitado una falta, el colegiado no había señalado nada y decretó penalti que transformó Alvaro. Una jugada que retrata lo que ha sido el Ibiza este domingo. Hay días en los que lo mejor es no salir de casa.