Triguero dice que la nueva depuradora de Vila, que estará operativa en junio de 2024, aliviará el "infierno fecal" de la ciudad

Ibiza

En febrero de 2024 la obra estará terminada y en junio entrará en funcionamiento. Son las fechas que ha avanzado el director general del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica, Teodoro Estrela, de la puesta en marcha la nueva depuradora de Ibiza. Una infraestructura imprescindible para resolver de una vez por todas los problemas de vertidos fecales en Vila que ha financiado el gobierno central y que ha costado 40 millones de euros, 15 más que el presupuesto inicial.

Estrela, junto con el alcalde de Ibiza, Rafa Triguero, y el vicepresidente del Consell Insular, Mariano Juan, ha visitado los trabajos que han entrado en su recta final. En la línea de lo que ya apuntó aquí en la SER el director general de Recursos Hídricos del Govern, Joan Calafat, en el primer trimestre del año que viene se empezarán a bombear las aguas residuales de la estación de bombeo de la actual planta.

Triguero, ha señalado que la ciudad lleva años sufriendo durante muchos años "un infierno fecal", por los vertidos continuos, por lo que celebra que con la nueva depuradora se puedan "aliviar esta grave incidencia que venimos sufriendo".

Por su parte, el director general señala que hacen falta entre tres y cuatro meses para que se consigan los parámetros de calidad óptimos que permitan desconectar la EDAR y que se pueda ceder al Govern la gestión de la nueva planta ubicada en sa Coma.

Estrela afirma que la red canalizaciones está ya finalizada con las tuberías de impulsión y retorno. Se van cerrando zanjas e instalando la maquinaria y mobiliario en la nueva planta. El incremento de presupuesto viene condicionado por el cambio de trazado de las tuberías de impulsión.