"Desde la pandemia de la COVID, hablamos y consultamos más sobre la depresión"

Palma

Este sábado se celebra el Día Mundial de la Lucha contra la Depresión, un trastorno de tipo mental y no enfermedad debido a que "no tiene una causa clara y concreta, sino que son varios factores los que inciden, tanto biológicos como ambientales". Es lo que ha explicado en la SER la psicóloga clínica Aina Sastre, quien ha añadido que los casos son muy variados y dependiendo de la persona en concreto, pero los mayoritarios están relacionados con el rendimiento en el trabajo, las dificultades en pareja o la pérdida de un familiar.

La clave que ha detallado es que el momento para acudir a un profesional a pedir ayuda es "cuando notamos que las reacciones emocionales o cambios en el comportamiento son más frecuentes y duraderas y que, además, vemos que interfieren en el trabajo". Afortunadamente, Sastre ha subrayado que, sobre todo, "desde la pandemia de la COVID, la gente pregunta y se informa más sobre la depresión y tiene menos miedo de pedir ayuda".

"Lo cual no quiere decir que hayan aumentado los trastornos mentales con la pandemia, ha habido más síntomas depresivos y se ha consultado, pero no tiene por qué haber habido una prevalencia de los trastornos depresivos", ha matizado.

Lo que está por ver es que ese mayor compromiso y concienciación se traduzca de verdad en los centros sanitarios. Sostiene que las administraciones sí han aumentado su preocupación en lo referente a la Salud Mental, "incluso con fondos y aumento de plazas de psicólogos clínicos en la sanidad pública balear en los últimos años, se han duplicado, pero no es suficiente".

Ha afirmado que el primer paso para mejorar la concepción de este trastorno ya se está dando con esa pérdida de vergüenza a la hora de pedir ayuda, lo necesario ahora es que se le pueda brindar esa ayuda. Junto a ello, Sastre ha hablado de otro tipo de factores alejados del ámbito sanitario, pero que "inciden, y mucho, en el estado de la salud mental de la sociedad". El mercado de la vivienda o las condiciones laborales serían dos ejemplos.