Marcus Cooper: "Tengo la ambición máxima: luchar en París por dos medallas"
Este miércoles comienza con el resto del equipo una concentración de tres meses en Sevilla,
París
Después de ser campeón olímpico en 2016 (K1 1.000) y subcampeón en 2020 (K4 500), el piragüista mallorquín Marcus Cooper encara París 2024 con el propósito de ganar dos medallas en las mismos Juegos, un reto "realmente posible, siendo objetivo".
Este miércoles comienza con el resto del equipo una concentración de tres meses en Sevilla, en la que Cooper ya sentirá que está "en competición" y que les servirá para afinar "el acople" imprescindible para triunfar.
En París, ciudad a la que se desplazó como parte del programa ''Talento a bordo'' de Iberia, el máximo candidato a ser el abanderado del equipo español dijo a EFE que nunca asegura un resultado, pero que su ambición "es máxima".
P. Comienza el año olímpico. Incluso para alguien con sobrada experiencia olímpica y con unos resultados tan destacados, ¿los retos y las ganas se van renovando de temporada en temporada?
R. Por supuesto. Es difícil llegar a lo más alto, pero es más difícil todavía volver a repetirlo. Tienes la dificultad de seguir siendo el mejor o estar en lo más alto, pero además con el hándicap de no relajarte, de mantener la humildad, de seguir luchando de la misma manera año tras año. Quizás hay que plantearse objetivos distintos para dar tu mejor versión en otras modalidades, como es mi caso, y así mantener esa motivación y seguir teniendo retos. Y superarme de alguna manera. Eso es lo que yo hago para seguir disfrutando de este deporte.
P. ¿Hasta dónde llega su ambición?
R. Tengo la ambición máxima: superarme y luchar en París en dos modalidades, en vez de solo una, ' + Char(39) + 'solo' + Char(39) + ' entre comillas, como hice en los dos últimos dos Juegos Olímpicos.
P. ¿Cuál es la agenda para los próximos meses?
R. A mí me gusta sentir que ya estoy en competición desde el día uno de la temporada. No es que vaya a aumentar el rendimiento por estar más cerca de los Juegos Olímpicos. Y así lo ha estado haciendo desde el día uno. Ahora ya hemos acabado la fase de pretemporada y empezamos a preparar los ritmos de competición. Empezamos a especializarnos otra vez en el K4, porque el principio de temporada es individual.
Nos tocan tres meses de invierno en Sevilla, porque son muy importantes las condiciones meteorológicas y en Sevilla son mejores ahora que en el norte, donde tenemos la base en Asturias. Tras la concentración en Sevilla, a partir de abril estaremos totalmente concentrado en los Juegos Olímpicos y en las dos competiciones que tenemos previamente, que nos servirán para preparar los Juegos.
P. El campeonato del mundo de 2024 salió regular para el K4, que obtuvo su plaza olímpica pero fue séptimo y no logró revalidar el título. ¿Cómo se digirió aque resultado y qué se aprendió de ello?
R. Séptimo puesto, séptimo del mundo, es un buen resultado, siendo objetivo. Pero para nosotros, si eres realista, no es un buen resultado. No estamos acostumbrados a ello, y más cuando el año anterior, en 2022, habíamos quedado campeones del mundo. No nos lo esperábamos, pero siendo positivos, como somos, a veces ayuda porque somos humanos y ayuda a tener un mal resultado. De hecho, me recuerda a mí cuando en 2015 acabé la temporada con un mal resultado y eso hizo que yo cambiase el chip y me pusiese de modo obsesivo a buscar mi mejor versión en 2016. Ahora es parecido.
P. El K4 lo forman cuatro palistas con personalidades muy diferentes. ¿Eso ayuda a componer un puzle ganador?
R. No diría que sea necesario que seamos distintos para formar un buen equipo, pero sí que logremos sincronizar esa diversidad para, en caso de tener cualquier diferencia, tanto en la forma de ser como en lo deportivo, ir a la par. En el piragüismo es muy importante esa sincronización. Ahí está nuestro fuerte, que entrenamos desde el día uno de la temporada juntos, concentrados en un mismo sitio, y trabajamos mucho en esa acople. Así lo llamamos, el acople del K4. Es importante que nos llevamos bien personalmente, además de deportivamente, y así ocurre en nuestro caso. La convivencia y el intercambio de información están totalmente normalizados. Es una de las mayores ventajas que tenemos respecto al resto del mundo.
P. ¿Hablan abiertamente entre ustedes de previsiones de medallas?
R. Yo nunca aseguro un resultado. Ni de cara al exterior ni hacia dentro de mí. Lo que sí que tengo muy claro, y lo digo a viva voz, es que es que ese es mi objetivo, el objetivo de luchar por dos medallas. El éxito será sacar mi mejor versión en dos modalidades, ser competitivo de verdad, con garantías en las dos. Pero por trayectoria, por palmarés histórico y porque sabemos de lo que somos capaces, todo ello nos lleva a pensar que podemos realmente traer dos metales, no solo que lo vayamos a hacer bien, sino que sabemos que es realmente posible, siendo objetivo.