La oposición pide una investigación, una auditoría y explicaciones de la gestión de Bonet

Palma

Los grupos de la oposición en el Consell de Mallorca han pedido este lunes al presidente insular, Llorenç Galmés, una investigación exhaustiva, una auditoría y explicaciones sobre las negociaciones y gestiones en las que haya intervenido la exconsellera de Hacienda y Función Pública Pilar Bonet.

En el pleno extraordinario del Consell de Mallorca de este lunes, para dar cuenta de la renuncia de Bonet por su posible implicación en un supuesto desfalco en una empresa antes de ser consellera, la portavoz del grupo socialista, Catalina Cladera ha advertido: "Volvemos a tener la sombra de la corrupción en el Consell de Mallorca".

Cladera ha recalcado que Bonet ha gestionado un presupuesto de más de 600 millones de euros y ha asegurado que lo publicado sobre "un presunto desfalco millonario" pone en duda la gestión de estos últimos 7 meses por lo que "hay que hacer una auditoría externa", como también en el Ayuntamiento de Llucmajor, donde fue regidora de Hacienda.

Ha recordado que, durante la tramitación de los presupuestos de 2024, los socialistas alertaron de que estaban "descuadrados" y ha reclamado una relación de todos los gastos a los que Bonet haya dado conformidad. Cladera ha advertido de que en los casos de corrupción sentenciados en Baleares los gastos tenían de controles internos en los que no se habían dado cuenta de las irregularidades.

La socialista ha acusado a Galmés de escudarse "detrás de la interventora y de los técnicos" y le ha pedido que no eluda su responsabilidad. "Señor Galmés, ¿pondría la mano en el fuego de que no ha afectado a la gestión de la institución? Y entonces le hago otra pregunta: Si sale algo ¿dimitirá?"

Cladera ha acusado a Galmés de haber hecho dimitir a Bonet y ocultarlo alegando motivos personales y ha denunciado que supieron lo ocurrido por la prensa.

El portavoz de MÉS per Mallorca, Jaume Alzamora, ha asegurado que un desfalco se produce "porque quien lo ha provocado ha sido bastante hábil y lo ha hecho", por lo que ha pedido "una investigación profunda de todas las cuentas y de todas las negociaciones que ha hecho Bonet".

"Tenemos que ser cuidadosos y tener la máxima transparencia; pedimos una investigación interna exhaustiva para que todos estemos tranquilos", ha reclamado. "Confiamos en los técnicos totalmente, en quien no confiamos es en vosotros", ha dicho a los miembros del gobierno, a quienes ha recordado que "el PP es el único partido condenado por corrupción".

Alzamora ha tildado las explicaciones de Galmés de insuficientes, porque todo lo que ha dicho en el pleno ya se había publicado.

El portavoz del Pi, Proposta per les Illes, Antoni Salas, ha pedido que se aclaren las negociaciones de Bonet sobre la tarifa de tratamiento de residuos urbanos que han costado 43 millones al Consell de Mallorca.

Salas ha insistido en preguntar en qué negociaciones participó la consellera, "donde se haya podido negociar qué porcentaje correspondía pagar al Consell en según qué temas y por qué conceptos" para asegurarse de que "cada céntimo que pagan los contribuyentes se dedica a lo que se tiene que dedicar y se obtiene el mayor provecho".

Ha reclamado que se auditen esas negociaciones y que se analice "si hubiera podido haber nada que no tocaría".

El portavoz ha criticado los ataques entre el gobierno y la oposición en el pleno de este lunes, porque "los reproches mutuos no aportan nada a la ciudadanía". "Hoy era el día de aclarar la motivación íntima que lleva a convocar el pleno con tanta celeridad, que hubiera transparencia y eso no se manifiesta con las acusaciones cruzadas entre las dos bancadas de esta sala ", ha cuestionado.

El conseller de Presidencia, Toni Fuster, ha insistido en que Galmés tuvo constancia el jueves durante el pleno de "unos hechos" que se publicaron el sábado y en que las decisiones se adoptaron en cuestión de una hora, que es lo que tardó Bonet en dimitir.

Ha destacado la labor de los responsables económicos de la institución insular. "Nos transmitieron tranquilidad desde el principio: que el Consell tiene unos mecanismos de control y supervisión que hacen prácticamente imposible que se puedan desviar fondos públicos de cuentas del Consell a cuentas privadas".

Fuster ha admitido que "los hechos que se publican son graves por el hecho en sí y por las cantidades" del supuesto desfalco y ha insistido en que Galmés ha dado "una lección de contundencia y transparencia".

Ha recalcado que el gobierno respeta la presunción de inocencia y ha pedido a la izquierda que "sean prudentes y comedidos", porque España es un Estado de Derecho "donde la presunción de inocencia se presume y la culpabilidad se demuestra". "No es la primera vez que condenan a alguien por adelantado, especialmente si es del Partido Popular, y después no tienen la decencia de pedir perdón".

Ha acusado a la izquierda de no querer saber lo que ha pasado y tener el único interés de "obtener rédito político por unos hechos que tienen que ver con el ámbito privado de la señora Bonet" y ha subrayado que el presidente "ha contestado con transparencia, celeridad y con la verdad".

Galmés ha dicho en su última intervención en que el sábado llamó a todos los portavoces para informarles de la situación y convocó el pleno extraordinario el primer día hábil tras la dimisión.

Ha acusado a la oposición de "manipular los hechos para tener rédito electoral" porque los presuntos hechos "graves" que se atribuyen a Bonet no guardan ninguna relación con su gestión pública y son de su trabajo en una empresa, razón por la que se atribuyó su dimisión a "motivos personales".

"Hacer planear la sombra de la duda y vulnerar la presunción de inocencia evidencian la hipocresía y la doble vara de medir de quienes un día gobernaron esta institución", ha concluido.