Investigadores de la UIB indagan en la mejora del potencial de producción del cannabis con fines medicinales
La UIB, que desarrolla el proyecto en colaboración con la empresa Bio Island XXI, ha tardado más de dos años en obtener el aval de la Agencia Española del Medicamento para cultivar cannabis con fines de investigación científica
Jeroni Galmés, catedrático que dirige el estudio de la UIB sobre el cannabis medicinal
Palma
Investigadores de la Universidad de las Islas indagan en la mejora del potencial de producción del cannabis con fines medicinales. Se trata del primer proyecto de las islas que cuenta con el aval de la Agencia Española del Medicamento para cultivar e investigar con esta planta. La UIB ha tardado más de dos años en tramitar la autorización para llevar a cabo el proyecto, que estudia si las altas concentraciones de CO2 sobre la planta permiten optimizar su producción rebajando el consumo de agua.
El catedrático en Fisiología Vegetal de la UIB, Jeroni Galmés, explica que el proyecto ha permitido sembrar plantas de cannabis de dos variedades mejoradas genéticamente en el invernadero de bioseguridad de la universidad. Se han incrementado las concentraciones de CO2 y se ha comprobado que eso deriva en una eficiencia más elevada en el uso del agua y de los nutrientes. Esto, señala, permitirá optimizar los cultivos de futuras variedades. "Por la fisiología de las plantas, a mayor concentración de dióxido de carbono, mayor capacidad fotosintética y por tanto productiva, a priori, de las plantas" señala Galmés.
La segunda parte de la investigación se centra cuantificar los cannabinoides de las plantas resultantes de la primera fase. El catedrático de química analítica, Manuel Miró, explica que su trabajo permitirá conocer los compuestos de potencial medicinal que han producido las plantas. "Nuestra contribución del laboratorio de análisis químico es concluir la propuesta para evaluar la calidad y cantidad de perfil cannabinoide obtenido de las plantas cultivadas en condiciones controladas" sostiene.
El último paso sería comenzar a probar esos compuestos en ensayos clínicos. La investigación de la UIB se lleva a cabo con la colaboración de la empresa local Bio Island XXI. Su propietario, Miquel Galmés, afirma que decidió invertir parte de su dinero en la investigación del cannabis medicial tras el caso de un ser querido a quien solo le funcionaban los derivados de esta planta para aliviar los dolores de la Esclerosis Múltiple. Actualmente sólo hay dos medicamentos derivados de la planta autorizados en España, uno para tratar la Esclerosis Múltiple y otro para la epilepsia infantil. Este miércoles el Ministerio de Sanidad ha anunciado que inicia el trámite para la regulación del cannabis medicinal.
