El Govern "parchea" el Ibassal tras eliminar el refuerzo de inspección laboral de verano
Con 400 mil euros de coste, en 2023 recaudó 677 mil por todo tipo de multas. CCOO critica que las condiciones laborales "no son prioridad" en el Ejecutivo de Prohens
Camarero en una terraza / Marta Pérez
Palma
El Govern "parchea" los 400.000 euros de la tradicional campaña de refuerzo de inspección laboral de verano. Esta fue eliminada en noviembre después de haberse aplicado desde 2015 y, ahora, el Ejecutivo de Marga Prohens ya le ha encontrado destino: reforzar el Ibassal, modificando su estructura y aumentando el personal. Sin entrar en más detalles.
La directora general de Trabajo y Salud Laboral, Catalina Cabrer, informaba de ello la pasada semana a los sindicatos en el Consejo Rector y el Consejo de Dirección de Salud Laboral. La secretaria de Políticas Sociales de Comisiones Obreras, Eva Cerdeiriña, ha criticado que "se trata de un parche, que, por otro lado, "no es suficiente, que elimina una herramienta muy valiosa para los trabajadores de Baleares en los meses de julio y agosto". Ha criticado, por tanto, "esta forma de trabajar tan poco eficaz de la Conselleria de Empleo".
Ha incidido en que lo peor es que la Conselleria que dirige Alejandro Sáenz de San Pedro haya eliminado una campaña que "funcionaba bien" desde que se implementó en 2015, siendo pionera a nivel nacional.
El valor de las multas en 2023 alcanzó los 677 mil euros
Según cifras del Ministerio de Trabajo, en los dos últimas temporadas turísticas esta campaña de refuerzo de inspección ha mejorado la situación laboral de más de 2.000 personas por diferentes motivos, como ampliar las horas de su contrato o, directamente, pasar de eventual a indefinido.
Se detectaron infracciones en empresas que no tenían dado de alta en la Seguridad Social a algún trabajador; casos en los que se aprovechaban de una persona en situación irregular en España, sin permiso de trabajo o residencia; también casos de personas que cobraban la prestación de desempleo; y dos clásicos como son la obligatoriedad de hacer más horas de las estipuladas o, directamente, vulnerar la normativa de los contratos de trabajo. Todo ello, sin olvidar, incluso, casos de obstrucción a la inspección laboral.
Solo el pasado verano se interpusieron multas por valor de casi 677.000 euros con los 12 inspectores desplazados a las Islas, una cantidad que supera los 400.000 de coste inicial. Por ello, de cara a este próximo verano, con más volumen de trabajo en Baleares, el sindicato ni entiende la maniobra ni espera que este tipo de infracciones se puedan controlar.
Silvia Montejano, secretaria general de la Federación de Servicios, ha subrayado que "no sé si es para contentar a algún sector o por ideología, pero desde luego es un mensaje de cuáles son sus prioridades, y no parece que sean las condiciones laborales". "Esta campaña funcionaba y, además, era rentable, no han sabido darnos un motivo de por qué se elimina, y no van a poder cumplir esas quince o veinte mil inspecciones que dicen que harán durante 2024", ha agregado.
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