Sáenz de San Pedro sigue sin explicar los indicios que le llevaron a hacer un barrido de micrófonos en la conselleria
El PSOE le acusa de protagonizar un episodio de Mortadelo y Filemón
Palma
El Govern gastó casi 5.000 euros en rastrear micrófonos en la conselleria de Empresa y Trabajo en base a elucubraciones. Alejandro Sáenz de San Pedro afirma que ordenó el barrido electrónico de su oficina porque nunca se había hecho ningún tipo de control de seguridad y era un recinto que había acogido durante años numerosas reuniones con personal externo. El barrido, por cierto, no encontró ningún aparato de grabación.
El conseller ha comparecido este miércoles en una comisión para explicar los detalles del encargo aunque no ha aclarado nada nuevo. Sáenz de San Pedro ha señalado que encargó a una agencia de investigación especializada el barrido electrónico del despacho con el único objetivo de garantizar la confidencialidad de las reuniones y conversaciones que tienen lugar en la Conselleria. Hoy Sáenz de San Pedro no ha hablado de los indicios o las sospechas que, según dijo cuando trascendió el asunto, le habían llevado a la contratación de la agencia de detectives.
Una serie de elecubraciones que quedaron en nada. La agencia de detectives no encontró aparatos de grabación. Sólo hipótesis, porque el resultado del barrido fue infrustuoso y sólo se encontraron indicios de que "podría haber habido" micrófonos, según ha asegurado el conseller.
Las explicaciones del conseller han sido breves y reiterativas y no han convencido a los diputados de la oposición. El diputado de Més per Mallorca, Ferrán Rosa, ha incidido que las sospechas de presencia de micrófonos a las que el conseller se refirió hace semanas. Unos indicios que, en teoría, le llevaron a contratar a la agencia de detectives. Rosa ha censurado la falta de explicaciones del responsable de Trabajo y que no aclare si esos indicios eran hipotécticos o basados en cuestiones prácticas.
Ares Fernández, diputado del PSOE, ha defendido que si la duda sobre las escuchas hubiera sido razonable el asunto habría sido de gravedad. Sin embargo, ha señalado que en este caso, la trama se parece más a la de un tebeo de Mortadelo y Filemón. Desde el PP han defendido la iniciativa de Sáenz de San Pedro de recurrir a una empresa de detectives privados para mantener un perfil bajo sobre el asunto.
