El Colegio de Arquitectos: "Las políticas de vivienda necesitan 10 o 15 años para intentar revertir la tendencia del mercado"
En el último año se planificaron 1.853 nuevos pisos en Baleares, un incremento del 7%. Sin embargo esta cifra está muy lejos de su máximo histórico de 2007 cuando se construía ocho veces más, alcanzando ese año las 14.300 unidades
Palma
La creación de pisos crece en Baleares y supera al planeamiento de villas y chalets. En el último año se planificaron 1.853 nuevos pisos, un incremento del 7%. Sin embargo esta cifra está muy lejos de su máximo histórico de 2007 cuando se construía ocho veces más, alcanzando ese año las 14.300 unidades. La obra nueva en Baleares no permite, ni de lejos, atender la demanda existente. A estas nuevas viviendas las clases medias y bajas no pueden ni siquiera acceder.
El decano del Colegio de Arquitectos de las islas ha dado un toque de atención a las administraciones y ha reclamado un pacto de estado en materia de vivienda. Y es que Bernat Nadal denuncia que el mercado de la vivienda ha entrado en un bucle de precios que saca directamente a la población local. Considera que las medidas que ha aprobado el Ejecutivo de Prohens pueden contrubuir a mejorar la situación y, aunque dice que es pronto para valorar los resultados, cree que las cifras que maneja el Govern podrían ser muy optimistas. Nadal afirma que la situación actual tardará unos 15 años en empezar a revertirse e insiste en la necesidad de un pacto global de las adminsitraciones que no esté al albur de los cambios de gobierno.
El decano de la demarcación de Mallorca, Joan Cerdà, lamenta que los asuntos realmente trascendentales a nivel urbanístico y que podrían conllevar un cambio en las planificaciones siempre se aprueben mediante la vía del decreto ley.
El Colegio de Arquitectos de las islas cree los nuevos modelos de convivencia y los cambios sociales empunjan hacia viviendas más pequeñas, que en ocasiones no se construyen. Nadal apuesta por crecer en altura y en densidad para poder dar cabida a toda la demanda y a los crecimientos de población que se contemplan en el futuro. Cree una de las oportunidades perdidas para ello ha sido la zona de Nou Llevant.
"Nadie ha cogido el toro por los cuernos para atajar el problema" dice Nadal, que considera que mientras la vivienda sea una moneda de cambio político, la ciudadanía saldrá perdiendo.
