Los cruceristas que visitaron Ibiza en 2023 multiplicaron por tres la población residente, según IbizaPreservation

Ibiza

La isla de Ibiza batió en 2023 todos los récords históricos de llegada de cruceristas con el desembarco de 548.969 personas, que suponen un aumento del 39 % con respecto al máximo registrado en 2019.

La entidad ha dado a conocer los últimos datos recogidos en su Informe anual de Sostenibilidad sobre la llegada de cruceros durante el año pasado, que ha registrado un aumento “sin precedentes” en esta actividad, ha destacado el Observatorio de Sostenibilidad de IbizaPreservation en una nota.

La fundación se basa en los datos extraídos del IBESTAT, la Autoridad Portuaria y Ports de les Illes Balears, para detallar que los 548.969 cruceristas que visitaron la isla el año pasado representan un 86 % más que los 295.368 registrados en 2022 y en un 39 % el récord anterior de 2019, “cuando cerca de 400.000 cruceristas visitaron la isla”.

El año pasado, Ibiza registró una población residente anual de 159.180 habitantes, por lo que, según calcula la fundación, el conjunto de cruceristas que visitaron la isla “superaron 3,45 veces la población residente”.

En cuanto a los cruceros en tránsito, cuyo puerto de llegada y salida no es el de Ibiza, el año pasado se registraron 188 buques, un aumento del 34 % en comparación con los 140 registrados en 2022.

Este número es también mayor al registrado en 2017, cuando 183 cruceros visitaron la isla, marcando un nuevo máximo histórico.

Por su parte, la coordinadora técnica del Observatorio, Itziar Arratibel, ha señalado el “mayor tamaño y capacidad” de los cruceros que amarraron en Ibiza el año pasado, y ha puesto como ejemplo la similitud entre la cantidad de embarcaciones registradas en 2017 y 2023, con 183 y 188, respectivamente.

Ha comentado que, a pesar de que la cantidad de cruceros que amarraron en 2017 y 2023, en esta ocasión ha sido “similar”, con 183 y 188, respectivamente, el número de cruceristas aumentó un 62 % el pasado con respecto a las 338.849 personas que desembarcaron en 2017.

En comparación con el resto de las islas del archipiélago, Ibiza recibió el 31,8 % de los más de 1,7 millones de cruceristas que llegaron a las islas, un porcentaje que representa un aumento del 27,5 % con respecto a 2019, cuando la isla acogió el 23,06 % de cruceristas en Baleares.

Por otro lado, según destacan desde el Observatorio, la isla de Menorca ha experimentado una “tendencia opuesta”, con una disminución en el número de cruceristas que recibe.

Elisa Langley, bióloga del Observatorio, ha expresado su profunda preocupación por el impacto negativo que el turismo de cruceros puede llegar a tener en la costa y el mar Mediterráneo debido a que esta actividad “puede generar un impacto irreversible en nuestros ecosistemas marinos y costeros”, ha señalado.

Al respecto, ha detallado que estos buques vierten de manera continua “aguas de sentinas, aguas grises, aguas negras y lastre, que en muchos casos contienen especies invasoras”, a las que se suman los “residuos sólidos, la contaminación ambiental y visual, y los daños que provocan”.

Ha añadido que las consecuencias a largo plazo "apenas compensan los escasos beneficios económicos” que aportan a la comunidad local, sin olvidar que el aumento del número de cruceristas “contribuye a la saturación de los espacios naturales y paisajísticos”.

“Durante las 12 horas que estos gigantes transitan por nuestra costa, saturan los recursos de los que dependemos profundamente. Este fenómeno nos aleja cada vez más de la sostenibilidad turística y contribuye a aumentar el impacto negativo sobre nuestros ecosistemas”, ha destacado Langley.