1-1. La maldición del liderato sigue persiguiendo al Ibiza

Ibiza

La UD Ibiza ha hecho el mejor juego de la temporada, con fases brillantes de fútbol, más control y más posesión, pero sigue sin ganar en Can Misses, dos partidos, dos empates y donde ha vuelto a encajar un tanto de penalti y además ha jugado los minutos finales en inferioridad. Cosas del fútbol.

Con su empate ante el Hércules, los celestes pierden la ocasión de liderar en solitario la clasificación. Oportunidad perdida, que esperemos no se acabe convirtiendo en la misma historia de la pasada campaña, donde tampoco se ganaban los partidos en los que el equipo ibicenco podía colocarse al frente de la tabla.

Los locales no han podido con un Hércules, que ha tenido a su portero Abad a una de sus grandes figuras, pero que además, ha ido creciendo en su juego y ha tenido también ocasiones.

A los de Martí, que han sudado tinta para abrir la lata, les ha penalizado un error defensivo, cuando se habían puesto por delante en el minuto 75, en una acción sin aparente peligro, un saque de banda en la zona ancha favorable al Hércules. La acción ha terminado con un doble castigo, penalti y expulsión de Iago Indias, que estaba haciendo un gran encuentro, pero que se ha despistado en la marca del argentino Coscia

El entrenador de la UD dijo esta semana que no quería el balón para jugar en zona defensiva con pases y más pases, sino que la posesión tenía que traducirse en un fútbol vertical con llegadas al área rival. Y en el primer tiempo sus jugadores lo interpretaron a la perfección, aunque faltó la guinda del gol a la superioridad local.

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En esa fase, los celestes bombardearon al portero del Hércules, Carlos Abad que sostuvo a los suyos. El Ibiza llegaba por fuera, la tónica habitual en este inicio liguero, con sus carrileros, Astals y Javi Jiménez, pero por primera vez también progresaba por dentro, con Eugeni en la creación y Gallar apareciendo en la media punta. Juego dinámico, vertical, al que le faltaba el nueve finalizador.

La presión eficaz permitía recuperar enseguida el esférico y a partir de ahí, nada de especular, sino que el balón merodeaba enseguida el área visitante. Los disparos se sucedían, siempre desde fuera del área o desde la frontal. Naranjo fue el primero en probar los guantes de Abad a los tres minutos y el empuje local propiciaba más ocasiones, otro disparo lejano de Astals se marchaba alto. El juego se desarrollaba siempre en campo visitante. A Gallar le taponó un defensa su remate cuando estaba en buena posición y poco después otro disparo desde la frontal hacía volar al cancerbero del equipo alicantino.

El Ibiza forzaba saques de esquina que no encontraban rematador, reclamó un penalti por un por un agarrón a Unai Medina y seguía disparando desde fuera del área. A Unai, que entró en defensa por el lesionado Escassi, se le fue alto su disparo y Eugeni se topó con Abad. Eran los mejores minutos del Ibiza esta temporada, pero no llego el tanto que hiciera justicia a lo que se veía en el terreno de juego.

La pausa para la hidratación pareció frenar el ímpetu local y en cambio, dio vitaminas a un Hércules que hasta ese momento solo se defendía, pero que empezó a romper la primera línea de presión local y a generar ocasiones claras en el tramo final del primer tiempo. Romera en una acción en la que ganó la espalda a la defensa ibicenca se plantó solo ante Ramón y algo escorado cruzó demasiado el disparo que no encontró portería con todo a su favor.

La acción pareció dar bríos a los visitantes e hizo dudar al Ibiza, más impreciso y errático en las entregas. El Hércules crecía, empezaba a adueñarse de la pelota y generaba oportunidades. A Romera se le anulaba un gol por fuera de juego y a Aranda después de una estupenda acción individual se le marchaba ligeramente desviado un gran disparo desde la frontal.

Con el choque mucho más equilibrado se llegó al descanso y en la reanudación el partido se convirtió en un intercambio de golpes de dos equipos que buscaban el gol. Los visitantes eran una amenaza en sus llegadas y Ramón Juan estuvo providencial en un remate de Arana desde la frontal que se colaba. En la otra portería, Naranjo tuvo la más clara del encuentro con un cabezazo franco desde el área pequeña, pero otra vez Abad negó el tanto al equipo ibicenco. Gallar tuvo también una buena ocasión tras una conducción por el centro que finalizó con un disparo alto.

En esa vorágine de juego eléctrico, Martí cambió el dibujo dando entrada a Domenech y a Zarzana por Astals y un Pau Ferrer que brega y pelea, pero no es un nueve rompedor para la categoría y los equipos punteros de la categoría necesitan un killer en el área. Habrá que esperar que esa función la pueda hacer Quique González, que hoy no ha estado en la convocatoria por unas molestias

En el último cuarto de hora llegaron los goles. Se adelantó el Ibiza en una jugada de estrategia, una falta lanzada por Gallar la cabeceó Unai Medina, libre de marca en un error defensivo visitante y la pelota superó a Abad. Explosión de alegría en Can Misses con 2.700 aficionados en las gradas, pero la alegría duró poco.

En una jugada que parecía intrascendente, un saque de banda en la divisoria de los dos campos favorable al Hércules no fue contundente la zaga ibicenca en el juego aéreo y la pelota le quedó a Cocsia, mal defendido por Iago Indias que agarró al delantero del Hércules y el colegiado no dudó en señalar los 11 metros y expulsar al central del Ibiza.

El atacante argentino transformó el penalti y puso las tablas en el marcador. En los compases finales, con seis minutos de añadido y con muchos cambios en ambos equipos, el Ibiza ya no tuvo armas ni claridad para generar peligro y el Hércules pareció dar por bueno el punto tras un choque entretenido con alternativas en el juego que no dejó vencedores ni vencidos.