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Sociedad

Reclaman incrementar las tasas para jets privados en el aeropuerto de Palma

La plataforma contra la ampliación de Son Sant Joan denuncia que Mallorca es la región de España que más vuelos privados registra, superando los 12.000 en los primeros nueve meses del año

IBIZA, 10/10/2024.-Vista de un jet en el Aeropuerto de Ibiza este jueves. Los aeropuertos de Palma e Ibiza han acabado el verano como líderes españoles en vuelos privados y los únicos del país entre los diez aeródromos europeos con más demanda de este segmento de la aviación, cuestionado por los ecologistas por la elevada contaminación que produce.-EFE/ Sergio G. Cañizares / Sergio G. Cañizares (EFE)

Palma

El aeropuerto de Palma es el que más aviones privados recibe de toda España. En los nueve primeros meses de este año, Son Sant Joan ha registrado el aterrizaje de casi 12.400 jets. Muy de cerca le sigue el aeropuerto de Ibiza, el segundo de España con el tráfico más elevado de este tipo de aviones y superando los 10.000. Desde la plataforma contra la ampliación del aeropuerto de Palma reclaman un incremento de la tasas para estos vuelos.

El portavoz de la plataforma, Pere Joan Femenia, se hace eco de un informe de la entidad ecologista GreenPeace que sitúa en las cuatro toneladas y media el CO2 que emite de media un vuelo privado. Eso implica más de 55.000 toneladas emitidas en los nueve primeros meses del año a través de los jets que llegaron al aeropuerto de Palma. Femenia reclama que se deje de fomentar este tipo de aviación y se impongan tasas más gravosas a estos vuelos, porque considera que las actuales no compensan la cantidad de CO2 que emiten.

Femenia acusa a las autoridades de Baleares de fomentar este tipo de turismo de lujo que es el que más aviones privados utiliza. De hecho, cree que la ampliación del aeropuerto de Palma conllevará un incremento del tráfico de los jets privados. La plataforma es contraria a la política del Govern de intentar ampliar el mercado turístico a lugares como Estados Unidos o Asia debido al impacto medioambiental de los vuelos transatlánticos y la repercusión aún más negativa en problemas como el de la vivienda.