Casi treinta mil mujeres pasaron por el cribado de detección del cáncer de mama en Baleares, un 4% menos que en 2022
La tasa de supervivencia es del 85%. En 2023 se diagnosticaron 820 casos
Entrevista a José Reyes, presidente de AECC Baleares (19 de octubre)
13:22
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Palma
Este sábado, 19 de octubre, se celebra el Día Mundial contra el Cáncer de Mama, "un problema de primer orden", tal y como califican en la Asociación Española Contra el Cáncer, aludiendo las 148 mujeres víctimas en Baleares durante 2023. José Reyes, presidente, ha señalado que fueron 820 casos los diagnosticados en las Islas; por tanto, "se trata del que más afecta a la población femenina".
"Son números que nos colocan ante un problema enorme. Es fundamental llevar una dieta equilibrada, evitar el sobrepeso, así como el alcohol y el tabaco, y realizar ejercicio físico. Como métodos de prevención secundaria, hay que acudir a someterse al cribado de detección y al médico de cabecera al notar cualquier síntoma", ha resumido.
Son recomendaciones a tener en cuenta para las mujeres que sobrepasan los 50 años, edad clave en este sentido. Con más motivo si existen precedentes familiares de cáncer de mama. Según la Conselleria de Salut, ha disminuido en un 4% el número de mujeres que se han sometido al cribado de detección en Baleares en 2023. Son cerca de 30 mil, el 72,5% de las solicitudes enviadas por Salut, por un 76,9% de respuesta positiva del año anterior.
"Los antecedentes familiares son muy a tener en cuenta. Siempre que haya más de dos casos, o uno en el que se haya dado por debajo de los 50 años, se tiene que hacer una valoración detallada y personalizada a cada mujer que forma parte de esa familia", ha subrayado Reyes.
"Sobrevivir no quiere decir que estés bien después"
La tasa de supervivencia a cinco años es del 85%, una cifra que se ha mejorado mucho en los últimos años. Sin embargo, Reyes ha incidido en un factor poco conocido, el de las posibles secuelas que esta enfermedad deja en quienes la superan. "Existe miedo a la recaída, fatiga crónica o, incluso, riesgo de perder el trabajo", ha señalado. Todo ello se sostiene resumiendo que más de un tercio de las supervivientes no puede llevar una vida como la anterior al diagnóstico. "El hecho de no morir por un cáncer de mama no quiere decir que quedes bien después de sufrirlo", ha recordado.