Baleares registra 9,3 millones de pernoctaciones en septiembre, un 11 % más en un año
Crecieron un 4,1% en septiembre en comparación con el mismo mes de 2023 y encadena ocho meses de crecimiento
Las pernoctaciones en establecimientos hoteleros en Baleares crecieron un 4,1% en septiembre en comparación con el mismo mes del año anterior hasta sumar un total de 9.433.979 de pernoctaciones y encadenar ocho meses de crecimiento, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En los hoteles de la región se alojaron un 4,03% más de turistas en septiembre que en el mismo mes del año anterior, alcanzando los 1.759.286 de viajeros.
Por nacionalidad, 177.476 eran residentes en España, el 10,09%, mientras que 1.581.810 (89,91%) fueron extranjeros. Respecto al año anterior, los viajeros residentes en España crecieron un 0,4% y los extranjeros aumentaron un 4,4%.
Del total de pernoctaciones en Baleares, 648.603 las realizaron residentes en España (un 6,88%), mientras que 8.785.376 (93,12%) fueron residentes en el extranjero.
La tarifa media diaria por habitación se situó en los 146,75 euros, lo que representa una subida del 5,3% interanual. En general, los precios subieron un 7,51% respecto al año anterior en Baleares.
En total, en Baleares se alcanzó en septiembre una ocupación del 80,86% y el sector hotelero empleó a 71.665 personas (un incremento del 5% interanual).
Por comunidades autónomas, Baleares fue la región con un grado de ocupación por plaza mayor, con un 80,86%, seguida de Canarias (74,24%) y País Vasco (67,79%), mientras que en el lado contrario se situaron Castilla - La Mancha, (39,92%), Ceuta (44,31%) y Extremadura (45,97%).
Teniendo en cuenta el total de pernoctaciones registradas en España, Baleares fue la comunidad con más porcentaje de pernoctaciones (24,16%) en septiembre junto a Cataluña (17,08%) y Andalucía (15,57%).
En toda España, durante los nueve primeros meses de 2024 las pernoctaciones se incrementaron un 5,2% respecto al mismo periodo del año anterior. Las de viajeros residentes en España bajaron un 0,3%, mientras que las de no residentes crecieron un 8,2%.