Baleares necesita hasta mil trescientas nuevas enfermeras para atender "con normalidad" la sobrepoblación estival
El sindicato SATSE incide en que "va a peor cada verano" y alude al precio de la vivienda y las complicadas condiciones laborales como grandes razones

Imagen de archivo de personal de enfermería.

Palma
El IB-Salut necesita mil trescientas nuevas enfermeras para ofrecer un servicio como tocaría durante el próximo verano, en plena situación de sobrepoblación.
El propio sistema de salud no ha atendido la llamada de esta casa, pero desde el sindicato SATSE señalan que es la cifra total de nuevos profesionales que tendrían que llegar mediante contratos de larga duración, vacantes y también para sustituir las vacaciones de las enfermeras en plantilla a día de hoy.
Erlina Vijande, delegada sindical de SATSE en Son Espases, lamenta que es una cantidad "enorme" para garantizar una atención "medianamente normal". "Solo para garantizar las vacaciones de las profesionales actuales harían falta en torno a 850 nuevas en todo el sistema sanitario balear", ha subrayado.
Vijande lo considera "muy complicado" porque los problemas no son nuevos, comenzando por el desbocado precio de la vivienda. "Es mucha gente para cómo está la situación. Si no puedes vivir con tu sueldo de aquí, te terminas yendo. Y si ya estás aquí, en cuanto puedes, volverás a tu comunidad autónoma", ha explicado.
"Está claro que es un problema de vivienda, pero el Ib-Salut tampoco hace una captación en condiciones, ni la UIB es suficiente para nutrir el sistema de salud. Al final, cada verano es igual, es un «vamos a ver qué pasa»", ha lamentado
Respecto a las condiciones de trabajo del colectivo, o se mantienen o mejoran ínfimamente. Una de las reclamaciones del sector está en aprobar en Mallorca el complemento de difícil cobertura que actualmente se cobra en Menorca y Pitiusas, aunque tampoco solucionará el problema definitivamente.
"Mallorca ya está al nivel de Ibiza, se tiene que traer aquí porque no tenemos retribuciones económicas acorde al modo de vida que llevamos", ha apuntado Vijande. "Nos estamos sentando ahora en las mesas y no se está consiguiendo ninguna mejora en las condiciones, nos sentimos apartadas", ha agregado.
Y, dado que estos problemas no son nuevos, ¿cómo se ha venido solucionando esta situación verano tras verano? Vijande descarta utilizar la palabra solución, sino que habla de medidas como dar menos citas de agenda o cerrar camas, "las cuales, al final, se terminan abriendo ante el aumento poblacional propio del verano".
Ha explicado que aumenta el paciente extranjero, con la barrera idiomática que muchas veces ocasiona, y, junto al perfil, cambian también las atenciones, con un descenso de gripes y enfermedades respiratorias y un aumento de traumatismos y golpes, que, en ocasiones, "colapsan las urgencias".

Sergio Zabala
Madrid, 1992. Se graduó en Periodismo por la Universidad de Málaga. Su primer contacto con la profesión...