Cada bañista se lleva 38 gramos de arena cada vez que va a la playa en Baleares
Si la mitad de los turistas que el año pasado visitaron las islas estuvieron en una playa, se llevaron involuntariamente 306 toneladas de arena a su casa

Bañistas en una playa de Palma durante el primer día de la Fase 2. / Isaac Buj - Europa Press (EUROPA PRESS)

Palma
Si la mitad de los turistas que el año pasado visitaron las islas estuvieron en una playa, se llevaron involuntariamente 306 toneladas de arena a su casa. Es una de las advertencias del informe Mar Balear que pone sobre la mesa la evolución de los últimos datos de presión humana y turística en el archipiélago. Las islas Baleares ya soportan picos de dos millones de personas a la vez: el récord se batió el siete de agosto del año pasado con dos millones 79.000 personas.
El número de turistas que visitaron las islas se multiplicó por 58 en los últimos 66 años mientras que las plazas turísticas legales pasaron de las apenas 14.000 que existían en los años 50 a más de 600.000 en 2023. El ritmo de incremento poblacional tampoco da respiro, aunque el turismo crece a más velocidad que la población residente. Para la coordinadora del informe Mar Balear, Raquel Vaquer, estas cifras tienen consecuencias notorias y provocan impactos en el medio marino, debido a la producción de residuos y al consumo de recursos.
La mayor parte de la presión se genera en los municipios de costa y las playas son los ecosistemas más afectados. La arena que los visitantes se llevan involuntariamente amenazan la costa, donde se suman también los efectos de la subida del nivel del mar por el calentamiento climático. Además, los residuos que dejan las cremas solares afectan a los ecosistemas del fondo marino.
Vaquer señala que la elevada presión humana también tiene consecuencias en la capacidad de depurar las aguas. Algunas de las estaciones depuradoras superan su caudal máximo durante los meses de verano, en buena parte provocado por el incremento de las plazas turísticas en viviendas. En Mallorca, una de cada cuatro plazas son de vivienda vacacional. El informe Mar Balear es un proyecto colaborativo en el que participan todas las instituciones de investigación marina de las islas.




