Frente común de las barriadas de Palma contra el decreto urbanístico de PP-Vox
Los barrios se movilizan para mostrar su rechazo y denunciar "una nueva burbuja inmobiliaria en beneficios de los promotores"

Palma
Frente común de las barriadas de Palma contra el decreto urbanístico que PP y Vox aprobarán la semana que viene en el Parlament y que permitirá el crecimiento de hasta un 45% de la edificabilidad en las reservas de suelo urbanizable en Palma y construir en suelo rústico sin que se haya agotado el suelo urbanizable.
Ayer tarde, asamblea de la Federación de las asociaciones de vecinos, con una sala llena para denunciar lo que califican como "una operación del Govern de Prohens para favorecer a promotores, una nueva burbuja inmobiliaria que permitirá el crecimiento de más de 100 mil personas en la ciudad sin ningún tipo de proyección de incremento de servicios como centros de salud, colegios o accesos por carretera".
"Golpe de estado a la participación ciudadana"
La presidenta de la Federación, Maribel Alcázar, explica en la SER que el sentimiento entre las asociaciones de vecinos es "más de indignación que de resignación" por lo que avanza movilizaciones y asambleas de barrio durante todo el verano para informar a la ciudadanía "de esta nueva burbuja inmobiliaria que pretende impulsar el Govern con la aprobación de este decreto".
"Si realmente hicieran esto por una cuestión de la emergencia habitacional, meterían mano en el mercado en lugar de favorecer la especulación con viviendas que no sabemos a quién irán a parar pero lo que sí sabemos es que no será para los residentes. Se calcula que la población crecerá en los próximos años en 60.000 personas y ahora se pretende hacer vivienda para más de cien mil", sentencia Alcázar.
Crecimiento sin servicios
Alcázar traslada la preocupación de los vecinos que dan por hecho que este crecimiento urbanístico y el nacimiento de nuevas barriadas será "sin servicios públicos en una ciudad que ya está al límite".
"Tenemos la zona de Son Rapinya, La Vileta, Son Peretó que sólo tienen un centro de salud para 35.000 personas y ahora con el incremento poblacional a qué centro de salud irán", se pregunta Alcázar que lamenta que no haya ningún estudio técnico detrás. Asegura que aunque los promotores se comprometan a levantar un centro de salud "luego hay que dotarlos de personal". Lo mismo, dice, ocurre con otros servicios como colegios, centros para mayores o la movilidad: "¿Por dónde accederán a estas nuevas barriadas?", denuncia Alcázar que recuerda que precisamente esta zona ya tiene problemas de movilidad y acceso con un Camí dels Reis "saturado".
Movilizaciones
Con esta situación encima de la mesa, los vecinos anuncian movilizaciones y acciones concretas para ir informando durante el verano de las consecuencias de este decreto. La primera concentración será el próximo lunes a las 12:00 frente al Parlament coincidiendo con el debate y aprobación del texto en la cámara autonómica.
Le piden al Ayuntamiento de Palma que no ejecute el decreto y que antes de tomar alguna decisión hable, debata y consensue con los vecinos el futuro de la ciudad.




