Vecinos de Sóller: "Estamos acostumbrados a tal nivel de saturación que un día lleno ya nos parece normal"
La plataforma SOS Sóller habla de un julio algo por debajo de lo habitual en términos de masificación, pero "han comenzado a venir antes". Esperan un mes de agosto "tan horrible como el anterior"

Puerto de Sóller / Laszlo Szirtesi

Palma
La localidad de Sóller cierra un mes de julio algo más relejado a nivel de masificación turística, dicen los vecinos, que, sin embargo, esperan un agosto tan intenso como el anterior. SOS Sóller lo achaca a dos cuestiones; la primera, que los viajeros han comenzado a llegar antes al municipio. Por otra parte, admiten que la percepción de turistificación diaria ha cambiado al estar ya tan instaurados en esta dinámica.
Mariabel Vigo, de la plataforma, sostiene que "puede estar un poco por debajo del año pasado, pero nada esperanzador, es algo casual, creo yo; en agosto volveremos a estar como el año pasado o peor, que fue horrible".
Otro de los miembros, Bartomeu Miró, por su parte, ha señalado que "estamos ya acostumbrados a niveles tales de saturación, que un día que está lleno nos parece normal, cuando realmente está saturado".
La falta de aparcamiento para los residentes, ante la llegada continua de turistas en coches de alquiler, siempre ha sido uno de los problemas en la localidad, el cual se está solucionando con la construcción de parkings.
"El problema es que se está realizando a costa de retirar espacios naturales símbolo de Sóller, como los naranjos y los huertos, y esa no es la solución. No hay que hacer más parkings, hay que limitar el acceso de vehículos de alquiler", ha explicado.
Los efectos de la turistificación son diversos; uno de ellos, en el mercado inmobiliario. Vigo asume que ya es imposible acceder a una vivienda en el municipio y, tal y como ocurre con los parkings, considera que no es la solución la construcción sin control en suelo rústico.
"Es perder el control urbanístico sin arreglar el problema de base, que es tener un piso de dos habitaciones, nada más, no tantos chalets que permitirá esta ley", ha lamentado.
Los servicios y la utilidad de los negocios también van mutando en función de la radiografía que muestra la localidad. Aumentan los establecimientos de souvernirs y enfocados al turista, mientras que los comercios tradicionales siguen perdiendo presencia.
"Cada año cierra una librería, una tienda de fotografía, etc. ¿Qué necesidad hay de tener en la misma calle dos tiendas que venden sal marina? ¿O que venden chanclas para ir a la playa? Es que no es útil para el pueblo, estamos perdiendo carácter para convertirnos en un parque temático", ha criticado Miró.

Sergio Zabala
Madrid, 1992. Se graduó en Periodismo por la Universidad de Málaga. Su primer contacto con la profesión...




