La Plaça Pau Casals acoge la cuarta edición de Sopar a la fresca

Palma

La Plaça Pau Casals acogió ayer de movilizar a los vecinos de los barrios de Palma y organizó varias actividades donde los residentes fueron los protagonistas. Juegos de mesa, talleres de pintura o intercambio de libros fueron algunas de las dinámicas que se realizaron en esta cena.

Brunzit, ante la imposibilidad de realizar la cena en la Calle Fàbrica, apostó por la Plaza Glorieta Pau Casals, próxima al barrio de Santa Catalina.

Los vecinos fueron los protagonistas del evento y se encargaron de bajar sillas y mesas. El barrio fue testigo de un cruce generacional, donde los más jóvenes y los adultos compartieron espacio. Brunzit afirma que la iniciativa "genera ambiente" y ofrece a las personas la posibilidad de unirse.

La prohibición por parte de algunos ayuntamientos de la isla de sacar sillas a la calle es el principal dilema al que se enfrenta el colectivo. La iniciativa progresa y Brunzit tiene como objetivo extenderlo al resto de la isla.

El evento giró entorno al conflicto de Gaza y tanto Brunzit como organizaciones de Marcha por Palestina estuvieron presentes. Una de las actividades dentro del taller de pintura constó en diseñar carteles y mensajes expresando el apoyo al pueblo palestino.

El proyecto sigue vigente y cada miércoles los ciudadanos podrán acudir a las cenas y participar en sus respectivas actividades.