Ordenan demoler cuatro construcciones ilegales en Formentera usadas como infravivienda
Además, se impone una multa de 292.000 euros

Agentes municipales de Formentera / Consell Formentera

Ibiza
El Consell de Formentera ha ordenado la demolición de cuatro construcciones ilegales que se destinaban a infraviviendas. Asimismo, ha iniciado un expediente sancionador con una propuesta de multa que asciende a 292.000 euros por la construcción de varios volúmenes destinados a uso residencial sin la preceptiva licencia. La cuantía de La multa puede variar a la baja en caso de reconocimiento voluntario de la infracción.
Según consta en el informe técnico emitido por los servicios de Urbanismo, las obras constituyen una infracción urbanística tipificada como grave.
La tramitación se inició a raíz de una denuncia particular y de las posteriores inspecciones efectuadas a principio de 2025 en una parcela ubicada en la zona de es Cap.
Así, se hace constar que, de las diferentes construcciones, deberá ejecutarse el restablecimiento de la legalidad urbanística mediante la demolición de una construcción levantada sobre unos antiguos corrales y de 56,8 metros, que había sido reconvertida en vivienda.
En el mismo sentido, se encuentra una segunda edificación de 36 metros cuadrados, que también deberá ser demolida, y una tercera construcción de 67,8 metros cuadrados. Esta última fue construida inicialmente como una cisterna de riego y se ha convertido en vivienda de dos plantas.
Por último, también se ha ordenado la demolición de otra edificación que inicialmente era un porche y se ha decretado el cese de uso residencial de una quinta construcción, de 33 metros cuadrados, por motivos de seguridad y salubridad.
El presidente del Consell, Óscar Portas, ha subrayado que "la defensa del territorio y el cumplimiento de la normativa urbanística son una prioridad. No se trata únicamente de sancionar, sino de garantizar que el territorio se preserve frente a actuaciones que vulneran la legalidad y comprometen el interés general".
Asimismo, ha indicado que desde la administración insular no se permitirá la existencia de infraviviendas por muchas dificultades que existan en este ámbito. En este sentido, Portas criticó que ante una necesidad real de residencias "haya quien aproveche las circunstancias para hacer negocio".




