2-0. Una 'jaimitada' condena al Ibiza ante el Atlético Madrileño

Ibiza

Primera derrota liguera de la UD Ibiza en el campo del Atlético Madrileño. El conjunto ibicenco, como suele ser habitual arrancó muy bien, pudo ponerse por delante en el marcador, hizo un regalo infantil que dio ventaja al filial colchonero y tras unos minutos de zozobra en los que encajó otro gol, volvió a crecer, generando ocasiones mereció irse al descanso con algún gol en su casillero. Los ibicencos se toparon dos veces con la madera en los primeros 45 minutos.

La segunda mitad celeste fue un correcalles sin saber muy bien a que jugaba el equipo. Estaba cantado que Jémez volvería a la defensa de tres. Ha quitado un defensa, un centrocampista y un extremo para colocar un segundo nueve y otros dos jugadores ofensivos. El experimentó no dio frutos y ni siquiera llegó el gol que hubiera dado emoción al choque. Nadie tenía muy claro su sitio en el campo, el juego fue mucho peor que en el primer tiempo y el Atlético Madrileño perdonó claras ocasiones para ampliar su renta.

Tres jornadas seguidas sin ganar acumula ya la UD demasiado frágil cuando recibe un golpe y con demasiadas lagunas en el juego colectivo además de fallos individuales clamorosos.

Anunció Paco Jémez en la previa, que el filial colchonero tenía mucho cemento en la medular y que había que igualar físicamente la medular. Así que optó por el músculo de Glazer en la zona ancha en detrimento del hilo de seda que teje Gallar, cuando está inspirado, algo que se ha visto a cuentagotas en el arranque liguero.

Tampoco debió convencerle mucho la titularidad de Monju en el centro de la zaga ante el Antequera, así que ha vuelto a la pareja Iago- Nacho.

El resto del once inicial con los mismos que arrancaron la pasada semana.

La jornada pintaba propicia, derrotas contundentes de Eldense y Cartagena, el Murcia otra vez estrellándose, Hércules y Alcorcón repartiéndose los puntos. Así se las ponían a Fernando VII. Pero en esta categoría el Ibiza ha sido incapaz de aprovechar tropiezos rivales para poner tierra de por medio. Y este domingo se ha vivido otro día de la marmota

Como suele suceder, el Ibiza arrancó al galope, a los cinco minutos había puesto dos centros al área de esos que solo hay que empujarlos a la red, uno por cada costado y un tercero que si tuvo rematador, pero Sofiane con toda la portería para él mandó la pelota al larguero. El gafe continua.

Era un Ibiza poderoso, con la defensa muy adelantada y presionando muy arriba. Fede Vico estaba participativo por banda derecha, Bebé también se ofrecía y el dominio visitante era claro. Pero los partidos pueden dar un giro en el momento más inesperado. Una cesión al portero de la UD, Ramón Juan, acabó en desastre, el cancerbero tantas veces salvador, quiso controlar, en lugar de ceder de primera, la pelota se le fue larga y Bellotti, futbolista colchonero, que acudía a presionar aprovechó el regalo, robó el esférico y a puerta vacía ponía por delante a su equipo cuando solo habían pasado 11 minutos.

Una vez más, cuando recibe un tanto en compra, el equipo ibicenco se descompone y durante esa fase del partido es un desastre en todas las líneas. Se fallaban pases sencillos, todo eran imprecisiones. Nadie para poner orden en medio, donde un exceleste, Javi Serrano, barría todos los balones, insegura y transparente la zaga por el centro y en ese descalzaperros general se dieron un festín Iker Luque y Arnau Ortiz en el conjunto local.

El primero se topó con el poste y poco después gambeteó como quiso en la frontal y filtró un pase por dentro a Arnau Ortiz ante la pasividad de la zaga visitante, Ortiz solo tuvo que driblar a Ramón Juan para hacer el segundo cuado solo se habían jugado 18 minutos. Un despropósito defensivo visitante.

Peor no podían ir las cosas, aunque el Ibiza sacó orgullo, se recompuso y mereció recortar diferencias. Seguía echando en falta a Del Olmo, al que el choque de brega le venía grande y tampoco podía Sofianne con la experimentada pareja de centrales local.

Pero el buen trabajo de Del Pozo la zona ancha el pundonor de Unai Medina, casi un extremo más toda la primera parte, reactivaron a los visitantes que tuvieron varias ocasiones muy claras y no merecieron irse al descanso sin marcar.

Del Pozo con una volea sensacional se topó con el larguero, Unai Medina a la salida de un saque de esquina vio como primero un defensa y después el portero Esquivel le negaban el gol, Iago Indias remató fatal dos balones francos en saques de esquina y Bebé, se topó con la pierna de un defensa.

Con el Ibiza apretando se llegó al descanso y en la reanudación Jémez quitó a Iago Indias, mal en defensa, a un medio, Del Olmo, al que no se vio y Fede Vico, lejos de lo que se espera de él. Entraron Ernesto, Davo y Gallar.

Era una apuesta muy arriesgada y nada más ponerse de nuevo el balón en juego, El Atlético Madrileño perdonó el tercero en un mano a mano. Después Bebé se topó con Esquivel en una clara ocasión en un remate que iba a la escuadra. Pero en el Ibiza nadie defendía ni presionaba en la medular y los locales volvieron a generar un par de ocasiones muy claras que no supieron remachar.

A pesar de tener tantos futbolistas en el campo de perfil ofensivo, entró al campo también Señé, el conjunto pitiuso no sabía generar ocasiones más allá de forzar saques de esquina. Los delanteros no olían la pelota . Ni una jugada trenzada, sin ideas e incapaz de generar fútbol ofensivo.

Fue un Ibiza impotente, triste en su juego, obligado una semana más a cambiar de sistema y a jugar al límite por no haber sabido aprovechar sus momentos y por regalar goles. Es lo que viene pasando en las últimas semanas y conviene cambiar rápido de dinámica.